El TS condena a 2 años a un soldado por falso aviso de bomba en el cuartel de Bétera

Llamó dos veces en la misma noche al cuartel donde estaba destinado en Valencia.

El Tribunal Supremo ha confirmado la condena a dos años de cárcel que el Tribunal Militar impuso al soldado Antonio C.T. por el delito de falsa denuncia de artefacto explosivo en lugar militar que cometió cuando, una noche de celebración, llamó a su cuartel de Bétera dando un aviso falso.


"Yo solo te digo que hemos puesto una bomba en Bétera", dijo el soldado en la llamada que hizo al cuerpo de guardia de la Base Militar de Bétera donde estaba destinado, una llamada que fue atendida por el cabo José León Bernal.


El cabo atribuyó la primera llamada que recibió, en la que el interlocutor no dijo nada, a una broma de sus compañeros. Sabía que esa noche varios militares del cuartel habían organizado una cena en un restaurante de Valencia.


Pero cuando cerca de las once de la noche recibió la segunda llamada, en la que se hizo el aviso de bomba, "se quedó como parado", según testificó otra soldado que estaba junto a él.


La soldado Raquel Cejalvo le escuchó decir al cabo que, aunque el interlocutor que había dado el aviso había forzado la voz, estaba seguro de que era el soldado Antonio C. y de que se trataba de una broma.


Sin embargo, la soldado quiso asegurarse y por eso telefoneó a otros dos militares que estaban en la misma cena, quienes no contestaron a su llamada.


La soldado aconsejó entonces al cabo que activara la alarma y éste se dirigió al sargento de guardia, a quien le comentó que le había parecido reconocer la voz, ante lo cual el suboficial le aconsejó ser prudente, no dar nombres y, dada la gravedad de los hechos, activar la alarma.


A partir de ese momento fueron avisados el capitán y el coronel de la base y se desató el operativo previsto para este tipo de amenazas, lo que llevó a que se constatara la falsedad del aviso.


El condenado argumentó en su recurso que en su aviso no había concretado que la bomba estuviera en el cuartel de Bétera, sino simplemente en Bétera, mientras que el delito castiga el falso aviso de bomba en una sede militar, por lo que debía ser absuelto.


El Supremo desestima su argumento y señala que "al llamar a una base militar y afirmar que se ha puesto una bomba no es necesaria una mayor precisión".