El alcalde de Vitoria, Javier Maroto, ha mantenido este martes que las razones higiénicas a la hora de bañarse en una piscina municipal "no entienden de prejuicios" por razón de raza o religión y ha defendido el reglamento que prohíbe bañarse vestido o con un velo en la cabeza.

Maroto se ha referido, en una entrevista en Radio Euskadi, a la polémica surgida por la directriz que el Ayuntamiento de Vitoria ha transmitido a los socorristas tras publicarse la foto de una mujer bañándose en la piscina municipal de Gamarra con velo y ropa.

El regidor vitoriano ha destacado que las normas son iguales para todos y que "no hay excepciones", por lo que ha asegurado "no entender" algunas reacciones de partidos políticos y de organizaciones no gubernamentales tras conocerse su instrucción.

Ha recordado que acudir a una piscina municipal "no es obligatorio" y que a quien no le gusten las normas que rigen en esos espacios tienen otras opciones, como el pantano de Ullibari, cercano a Vitoria y donde "uno puede bañarse como quiera".