Respuesta a Rubalcaba

El Gobierno dice que su prioridad es la crisis, no reformar la Constitución

La vicepresidenta del Gobierno ha asegurado que en ocasiones se achaca a la Constitución "problemas que son de gestión" y que podrían solucionarse reformando las leyes "desde abajo".

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha subrayado este viernes que la prioridad del Ejecutivo en este momento es salir de la crisis económica y no afrontar un proceso de reforma de la Constitución Española, como la que propuso este jueves el líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba


En la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, Sáenz de Santamaría ha asegurado que el Ejecutivo debe fijar sus preferencias y lo que considera esencial en su acción de Gobierno, y entre sus prioridades no está una reforma constitucional.


Rubalcaba apostó este jueves por una reforma de la Carta Magna para que la sanidad pública sea un derecho fundamental igual que lo es la educación.


En respuesta a los informadores, Sáenz de Santamaría ha asegurado que en ocasiones se achaca a la Constitución "problemas que son de gestión" y que podrían solucionarse reformando las leyes "desde abajo".


La vicepresidenta ha recordado que algunas de las modificaciones planteadas conllevan la disolución de las Cortes, la convocatoria de elecciones y la celebración de un referéndum, con el coste económico y de estabilidad política que ello conlleva.


"Con el año que llevamos no es momento de convocar más elecciones, por no decir el dinero que cuestan unas elecciones. No estamos para gastos extras", ha alertado.


Tras subrayar que cualquier reforma de la Constitución necesitaría de un "buen clima de consenso", Sáenz de Santamaría ha afirmado que antes de plantear una iniciativa en este sentido, los partidos políticos deberían saber con qué apoyos cuentan.


"Cuando hay un clima amplio de consenso para la reforma se ha podido hacer. La Constitución no es inmutable", ha asegurado la vicepresidenta, que ha insistido en que con las actuales posiciones "divergentes" parece difícil alcanzar un acuerdo satisfactorio.


Preguntada por la ausencia de los partidos nacionalistas en la recepción oficial en el Senado con motivo del XXXIV aniversario de la Constitución, Sáenz de Santamaría ha mostrado su "respeto" a esta decisión y ha recordado que es la "tónica habitual" desde hace años.