IRÁN

Desalojan la Embajada británica en Teherán tras tres asaltos de estudiantes islámicos

Los sucesos se han producido tras la decisión de Irán de reducir sus relaciones con Londres debido a las nuevas sanciones británicas contra el país por su programa nuclear.

Estudiantes islámicos a la entrada de la embajada británica en Teherán
Desalojan la Embajada británica en Teherán tras tres asaltos de estudiantes islámicos
EFE

La Policía desalojó el recinto y las inmediaciones de la embajada británica en Teherán, después de que la legación sufriese tres asaltos de estudiantes islámicos que protestaban por las nuevas sanciones impuestas por Londres a Irán.


Según varios medios iraníes, la situación en la zona de la embajada británica, ubicada al norte de Teherán, se normalizó sobre las 20.15 hora local (16.45 GMT), cuando los agentes cargaron sobre los estudiantes, que habían iniciado su concentración frente a la legación a las 14.00 hora local.


Previamente, según Fars, el subcomandante de la Policía de Irán, general Ahmad Reza Radán, se desplazó a la embajada y dio un ultimátum a los estudiantes en el que les instaba a abandonar el recinto y disolver la concentración.


Los sucesos se han producido tras la decisión de Irán de reducir sus relaciones con Londres debido a las nuevas sanciones británicas contra el país por su programa nuclear, lo que llevó a grupos de estudiantes ultraconservadores a concentrarse frente a la embajada británica en Teherán.


Pasadas las 15.30 (12.00 GMT), varias decenas de manifestantes se enfrentaron a los policías que vigilaban la concentración, saltaron el portalón situado en el muro que rodea la embajada y, tras arriar la bandera británica e izar la iraní en el mástil del edificio, quemaron la enseña del Reino Unido.


Después, entraron en las dependencias, saquearon abundante documentación, la arrojaron por las ventanas y, según la agencia local Fars, también destruyeron algún retrato de la reina Isabel II de Inglaterra.


Según la agencia local Mehr, el personal de la embajada había sido evacuado antes de iniciarse el incidente.


Sin embargo, la agencia Fars indicó que los estudiantes retuvieron durante la tarde a seis miembros no identificados del personal de la embajada británica, que fueron liberados por la Policía y entregados a un representantes del Reino Unido pasadas las 19.00 (15.30 GMT).


Sobre las 18.00 (14.30 GMT), un nuevo grupo de estudiantes islámicos asaltó por segunda vez la embajada y saqueó y destruyó algunos documentos más en sus locales, momento en que fueron detenidas varias decenas de estudiantes.


Esto radicalizó la postura de los manifestantes, que exigieron la liberación de sus compañeros y aseguraron que no abandonarían la protesta.


Los concentrados hicieron público a última hora de la tarde un comunicado en el que reiteraban la petición de que se expulse de inmediato al embajador británico y se rompan totalmente las relaciones con el Reino Unido.


También propugnaban la ocupación permanente de la embajada británica, como sucedió con la Estados Unidos el 4 de noviembre de 1979, que duró 444 días y supuso la ruptura de relaciones diplomáticas entre Washington y Teherán.


Según la agencia IRNA, otros manifestantes también entraron en la residencia del embajador británico, que se encuentra en otro punto de Teherán, y causaron algunos destrozos antes de ser desalojados por la Policía.


Pasadas las 19.00, se produjo un tercer asalto de estudiantes a la embajada y, hora y cuarto después, la Policía utilizó todos los medios antidisturbios a su disposición para acabar con la protesta.


Exteriores lamenta lo ocurrido


El Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán ha manifestado en un comunicado que lamenta "el comportamiento inaceptable de algunos manifestantes" en las instalaciones diplomáticas británicas.


El escrito indica el respeto del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán por la legislación internacional y la inmunidad del personal y los recintos diplomáticas: "La República Islámica de Irán recalca su intención de proteger y preservar los recintos y el personal diplomático", dice.


Estos sucesos se han producido dos días después de que el Parlamento iraní ratificase por amplia mayoría una ley para rebajar el nivel de las relaciones con el Reino Unido al rango de encargado de negocios, lo que supone la retirada de embajadores.


La reducción de las relaciones se produce en respuesta a la decisión británica, adoptada el pasado día 21, de imponer nuevas sanciones financieras y a las industrias petrolera y petroquímica de Irán, medidas que también acordaron en esa fecha Canadá y Estados Unidos.


Estas sanciones se deben a la sospecha manifestada por el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) de que el programa nuclear iraní tiene una vertiente militar, lo que Teherán ha negado tajantemente y asegurado que es exclusivamente civil, con fines pacíficos.


La Unión Europea estudia también la imposición de nuevas sanciones a Irán, mientras que Rusia las ha considerado ilegales e inadecuadas y señalado que merman las posibilidades de establecer una negociación con Teherán respecto a su programa nuclear.