ARMENIA

Armenia decreta el estado de emergencia tras los duros enfrentamientos de policías y oposición

Al menos una persona murió en los enfrentamientos de la capital propiciados por los resultados electorales. El estado de emergencia, decretado por el presidente armenio, Robert Kocharián, regirá por un plazo de 20 días e incluye el toque de queda.

Las autoridades armenias impusieron el estado de emergencia en la capital, Ereván, escenario de violentos enfrentamientos entre la Policía y manifestantes de la oposición. El estado de emergencia, decretado por el presidente armenio, Robert Kocharián, regirá por un plazo de 20 días e incluye el toque de queda.


Fuentes médicas, que pidieron el anonimato, dijeron que al menos una persona murió en los enfrentamientos y dos policías y dos manifestantes tuvieron que ser hospitalizados.


Las fuerzas del orden rodearon la plaza frente a la Alcaldía de la capital, que poco antes habían recuperado los opositores, en medio de detonaciones y disparos y el sonido de las sirenas de vehículos policiales y ambulancias.


Con anterioridad, la Policía logró dispersar a los manifestantes y desalojar la plaza, pero poco después las fuerzas opositoras lanzaron un contraataque.


Pese al empleo de gases lacrimógenos y el despliegue de agentes antidisturbios, los manifestantes -provistos de piedras, cócteles molotov, pistolas de bengalas, palos y barras metálicas- consiguieron echar a las fuerzas del orden y recuperar la plaza. Varios vehículos policiales fueron incendiados y algunos de los opositores portan porras y escudos arrebatados a los agentes.

Después de un mitin


Los desórdenes en Ereván estallaron después de que la Policía disolviera violentamente el mitin que la oposición celebraba de forma interrumpida en la plaza de la Opera desde el 19 de febrero, cuando se anunciaron los resultados oficiales de las recientes elecciones presidenciales.


Según los datos proporcionados por las autoridades, el primer ministro, Serge Sarkisián, fue elegido presidente de Armenia con el 52,82 por ciento de los votos, seguido por Ter-Petrosián, con el 21,5 por ciento de los sufragios, y el líder del partido Orinats Ekir (País de Ley), Artur Bagdasarián, con el 17,7 por ciento.


Ter-Petrosián y Bagdasarián no reconocen los resultados de la Comisión Electoral, pero, mientras el primero reclama la anulación de los comicios y la convocatoria de otros nuevos, el segundo se limita a demandar un nuevo recuento de votos en más de 200 de los casi 2.000 colegios electorales del país.


Ter-Petrosián, a quien las autoridades mantienen bloqueado en su residencia sin haber decretado oficialmente el arresto domiciliario, anunció que las protestas continuarán, aunque insistió en que serán pacíficas.


De acuerdo con fuentes oficiales, el presidente electo, Serge Sarkisian, propuso negociaciones a Ter-Petrosián, pero el líder opositor las rechazó.