La estación de tren Victoria de Mánchester, en el norte de Inglaterra, fue reabierta este martes tras permanecer una semana cerrada por el atentado perpetrado fuera del estadio Mánchester Arena, en el que murieron 22 personas.

La instalación ferroviaria está junto a ese estadio, donde el pasado día 22 por la noche el terrorista suicida Salman Abadi hizo explotar una bomba de fabricación casera que llevaba en una mochila en el recinto del Mánchester Arena al término de un concierto de la estadounidense Ariana Grande.

El ataque obligó a cerrar la estación por medidas de seguridad y también para permitir que las fuerzas del orden pudieran realizar las labores de registro forense en el lugar.

Anoche miles de personas hicieron un vigilia en la plaza St Ann, de Mánchester, al cumplirse una semana del devastador atentado, en el que muchas de las víctimas fueron niños y adolescentes y que causó heridas a 64 personas.

En la vigilia, los asistentes portaron velas y respetaron unos momentos de silencio en recuerdo de las víctimas. Mientras tanto, la Policía continúa la investigación sobre la red terrorista que hay detrás del atentado. Un total de 16 personas han sido detenidas en relación con la explosión, de las que dos ya han sido puestas en libertad.

Además, la Policía ha pedido ayuda a la población para localizar una maleta azul que portaba Abedi el día del atentado y que fue captada por cámaras de seguridad de la ciudad.

"Quiero puntualizar que este es un artículo diferente al utilizado en el ataque", dijo el detective Russ Jackson, de la unidad antiterrorista del noroeste de Inglaterra.

"Si tiene algún detalle sobre la maleta, necesitamos que usted se ponga en contacto y nos lo haga saber", agregó Jackson en una declaración a la prensa dirigida al público.

Debido al avance de las pesquisas policiales, el Gobierno británico decidió el fin de semana reducir el nivel de alerta terrorista de "crítico", el más alto, a "grave".