Un ciudadano belga es uno de los cuatro fallecidos en el atentado de Estocolmo del pasado viernes, en el que un camión irrumpió en la principal calle peatonal de la capital sueca, confirmó este domingo el ministro de Asuntos Exteriores de Bélgica, Didier Reynders.

"Desgraciadamente, hemos perdido a un compatriota en el atentado de Estocolmo. Traslado mis condolencias a sus familiares y seres queridos", escribió el político belga en su perfil de la red social Twitter.

En declaraciones a la agencia Belga, Reynders precisó que las autoridades suecas han necesitado 48 horas para identificar a la víctima y agregó que han recibido la confirmación en la mañana de este domingo.

"Tras una primera identificación mediante sus documentos de identidad, que la víctima no tenía en su poder, la información ha sido confirmada a través de una prueba de ADN", explicó el titular de Exteriores, quien subrayó que el Gobierno tenía constancia de una persona desaparecida tras haber contactado con su familia, ya informada sobre el fallecimiento.

Según el diario 'Le Soir', el ciudadano belga murió atropellado por el camión en la calle peatonal.

De acuerdo con las informaciones de Reynders, no hay más ciudadanos belgas entre los heridos, indicó el mismo periódico.

Un camión robado irrumpió el viernes por la tarde en la principal calle peatonal de Estocolmo, recorrió casi 600 metros de la calzada, atropelló peatones y se empotró contra la entrada principal de unos grandes almacenes, en un suceso que dejó cuatro muertos y diez heridos hospitalizados, varios muy graves.

Tres de las víctimas mortales ya habían sido identificadas, según recogieron los medios suecos.

La policía cree que el autor es un uzbeko de 39 años detenido el mismo viernes y contra el que se han levantado cargos por un delito de terrorismo con asesinatos, aunque la investigación sigue abierta y no se descarta que haya tenido ayuda de otras personas.