El expresidente francés y líder del partido conservador Los Republicanos, Nicolás Sarkozy, ha arremetido este lunes contra el "irresponsable" primer ministro griego, Alexis Tsipras, a quien ha acusado de "mentir a su pueblo" y ahora pretender que los demás paguen las consecuencias.

Sarkozy, en su intervención en el Campus FAES junto al expresidente del Gobierno José María Aznar, ha subrayado que Europa no puede dar la espalda al pueblo griego, pero los griegos deben elegir entre Europa y un gobierno que quiere destruirla.

El expresidente francés ha acusado a Tsipras de haber prometido cosas que "sabía que no podía cumplir" y de liderar un gobierno "irresponsable" que cree que se puede "exonerar de cualquier responsabilidad" y dejar de cumplir las reglas mientras los demás pagan por ellos.

"Hemos querido una Europa fuerte; no podemos aceptar una Europa débil", ha recalcado Sarkozy, quien ha incidido en que o se encuentra una vía de solución y de compromiso o habrá "un fracaso aterrador con todas sus consecuencias".

En ese contexto, ha asegurado que el futuro de Europa "se va a jugar" en buena parte en el Mediterráneo, el vínculo entre África y Europa, y, o bien se encuentran las soluciones adecuadas, o "será el caos".

El dirigente francés ha insistido en que la democracia y la libertad requieren de reglas, porque es "demasiado fácil" decir a los demás: "Yo no respeto las reglas, paguen por mí".

Eso es a su juicio lo que ha hecho el Gobierno griego y ha preguntado por qué España, Portugal o Irlanda han hecho tantos esfuerzos si mañana pueden "exonerarse de cualquier responsabilidad y pedir a los demás que paguen burlándose así de lo que pueda ocurrir en Europa".

Sarkozy ha aludido al referéndum que ha propuesto el Gobierno griego sobre las propuestas de la UE y al hecho de que haya anunciado que pedirá que se vote en contra: "¡Qué irresponsabilidad, qué cinismo!", ha aseverado.

Sin embargo, Sarkozy ha abogado por que esta crisis sirva para consolidar la Unión Europea y acelerar la construcción de una zona euro "digna de ese nombre". Asimismo, se ha referido a la necesidad de consensuar una política común en materia de inmigración y a la lucha contra el terrorismo yihadista.

"Las democracias no tienen el derecho de ser débiles", ha proclamado Sarkozy, para quien si el Estado Islámico -"una banda de bárbaros", les ha definido- ha declarado la guerra a la civilización humana, hay que combatirlo con "voluntad" de ganar.

"Cuando se decide hacer la guerra hay que hacerlo totalmente, no se hace la guerra a medias, se hace la guerra o no se hace", ha apostillado.

Sarkozy ha reclamado además que los países de la UE revisen sus medidas de seguridad para acabar con la existencia de terroristas en suelo europeo que "quieren destruir" los países en los que viven. "No es un tema de izquierda o de derecha, sino de valentía y de voluntad, de lucidez y de rapidez", ha dicho.

En ese sentido, ha señalado que los musulmanes tienen derecho a vivir su religión, pero también la República Francesa tiene derecho a pedir "esfuerzos" para "asegurar la concordia, el entendimiento y la paz".