Milicianos hutíes se apoderan del material militar de cinco cuarteles de Saná

Combatientes del movimiento rebelde chií de los hutíes se han apoderado de una gran cantidad de material militar de cinco cuarteles que controlaron anoche en el centro de Saná, la capital del Yemen, informaron testigos.

Los milicianos trasladaron el material al barrio de Al Yaraf, considerado su feudo en la capital y ubicado en el norte.

Durante la noche se produjo el traslado de tanques, blindados, camiones cargados con armas y munición desde el centro de la capital al citado barrio, en la ruta que lleva al aeropuerto internacional de Saná.

Estos equipos fueron sacados de la sede del Estado Mayor del Ejército, del cuartel de la IV Brigada -encargada de proteger la Presidencia del país-, de la sede de la comandancia de la sexta región militar, del cuartel de la radio y del de la televisión.

Los combatientes hutíes han continuado acumulando este arsenal en almacenes y varios edificios esta madrugada, según los testigos.

El movimiento chií dijo ayer que sus combatientes se desplegaron en los accesos de esas instituciones y cuarteles para "protegerlos de eventuales saqueos", después de que las tropas yemeníes se retiraran de ellos.

Las avenidas de la capital están vacías de cualquier presencia de las fuerzas del orden, ya que los combatientes hutíes tomaron el control de las calles que unen el centro de la capital con los barrios del norte tras ocupar la sede del Gobierno y otras instituciones vitales.

Estas acciones se producen pese a que ayer las autoridades yemeníes y los hutíes firmaron un acuerdo de paz en Saná, bajo el auspicio de la ONU, para poner fin al conflicto armado que asolaba la capital del país desde el pasado jueves.

Los hutíes, que insistieron en su intención de no quedarse en Saná, rechazaron firmar "la cláusula de seguridad", que supone la retirada obligatoria de las milicias chiíes de la capital, así como de los edificios públicos y gubernamentales que han tomado durante los últimos días tras choques con el ejército yemení.

La cláusula también pedía la entrega al Ejército de todo tipo de armas pesadas con las que cuentan las milicias hutíes.

El presidente yemení, Abdo Rabu Mansur Hadi, prometió restaurar los subsidios al combustible, la causa aparente por la que las protestas llegaron a la capital en agosto pasado.

Tras alzarse en armas en 2004, los insurgentes chiíes controlan desde 2010 la provincia septentrional de Saada y tratan desde hace meses de ampliar las zonas bajo su dominio