Juicio contra ETA

Francia juzga a 7 etarras por el asesinato de dos guardias civiles

'Ata' y 'Txeroki', antiguos dirigentes de la organización terrorista, serán de nuevo juzgados en París.

Traslado de Biarritz a París del jefe de ETA, Mikel Carrera Sarobe, alias 'Ata', el 22 de mayo de 2010.
Etarras al borde del colapso operativo
EFE

Francia juzga a partir de este martes a siete etarras por su implicación en el asesinato en Capbreton en 2007 de los guardias civiles Raúl Centeno y Fernando Trapero, tres de ellos por ser los integrantes del comando que perpetró el crimen.


Se trata de Mikel Carrera Sarobe, 'Ata', Saioa Sánchez Iturregui, 'Hintza', y Asier Bengoa López de Armentia, que podrían ser condenados hasta a cadena perpetua si el Tribunal de lo Criminal de París los considera culpables del delito de asesinato con premeditación.


'Ata', al igual que Garikoitz Aspiazu Rubina, 'Txeroki', tendrá que responder también del cargo de dirigente de una organización terrorista, el primero por haber estado en el momento de los hechos al frente de la logística y el segundo al frente del aparato militar.


Durante las cuatro semanas en las que se ha programado el proceso se presentarán las pruebas recopiladas por los investigadores de que Carrera Sarobe, Sánchez Iturregui y Bengoa López de Armentia fueron los tres que acribillaron, el 1 de diciembre de 2007, a los dos agentes que trabajaban en el suroeste de Francia en la vigilancia y detección de miembros de la organización terrorista.


Asesinato con premeditación

Antes de disparar contra Centeno (que tenía 24 años) y Trapero (23) en un aparcamiento, se habían cruzado en una cafetería de ese mismo centro comercial de las afueras de Capbreton con esos guardias civiles, que habían llegado días antes desde Madrid e iban desarmados para su misión en cooperación con los servicios secretos franceses.


Los dos recibieron impactos de bala en la cabeza. El primero murió en el acto y el segundo quedó gravemente herido, también en el coche de servicio, y falleció cuatro días más tarde en el hospital de Bayona sin haber recuperado el conocimiento.


Los asesinos se dieron a la fuga con el Peugeot 307 robado con el que habían llegado y dos horas después, a cerca de 90 kilómetros de allí, en Haut Mauco, cambiaron a otro coche de la misma marca y modelo sustraído a su propietaria, a la que secuestraron temporalmente antes de abandonarla atada y amordazada en un pinar.


La huida, rocambolesca y accidentada, terminó el 5 de diciembre para 'Hintza' y Bengoa en Chateaunef du Randon, localidad a unos 300 kilómetros del lugar del crimen, gracias a la colaboración ciudadana.


Las pareja dejó numerosas trazas de su paso en las diferentes fases de esa escapada, así como testimonios de las personas que los vieron -empezando por la mujer secuestrada- y, como en el caso de Carrera Sarobe, la presencia de su olor fue identificada por los expertos en la cafetería de Capbreton.


Unas trazas que iban a vincular con los hechos en particular a 'Txeroki', pero también al resto de los inculpados en este sumario: Eider Uruburu Zabaleta, Ibón Goieaskoetxea Arronategi e Iratxe Sorzábal Díaz.



Iratxe Sorzábal Díaz, en busca y captura

Esta última es la única que no se sentará en el banquillo de los acusados, en el Palacio de Justicia de París, ya que sigue en busca y captura.


De hecho, Sorzábal Díaz es uno de los tres dirigentes etarras -junto a José Antonio Urrutikoetxea, 'Josu Ternera' y David Pla- que supuestamente han sido expulsados estas últimas semanas de Noruega, donde estaban en espera de negociar con el Gobierno español las llamadas "consecuencias del conflicto vasco".


Los asesinatos de Centeno y Trapero fueron utilizados en ese momento por ETA para ilustrar su voluntad de extender la acción armada contra España incluso fuera de sus fronteras, once meses después del atentado mortal del aeropuerto de Barajas con el que había quedado en entredicho el propósito de la tregua de 2006.


Cuarta condena para 'Txeroki'

Los familiares de los guardias civiles, al igual que el Estado español, se han constituido en acusación particular en este juicio, que podría suponer la cuarta condena en Francia contra 'Txeroki', que recibió la primera en rebeldía semanas antes de ser capturado el 17 de noviembre de 2008 en una estación pirenaica.


Este marzo ha sido sentenciado en dos ocasiones, en una a ocho años por los elementos derivados de ese arresto y en otra a 20 por el secuestro en el suroeste de Francia durante tres días a finales de agosto de 2007 de una familia guipuzcoana para robarle el coche con el que se iba a cometer un atentado, finalmente fallido, en Oropesa del Mar (Castellón).


Por esos mismos hechos igualmente recibió 20 años 'Ata', que está acusado como responsable de la logística etarra, y que se considera que sucedió a 'Txeroki' cuando fue arrestado al frente del aparato militar de ETA hasta su propia captura el 20 de mayo de 2010 en Bayona, en el País Vasco francés.