Australia

Australia investigará la broma que terminó con la muerte de la enfermera

La investigación se centrará en analizar si la emisora violó los requisitos de su licencia y las normativas vigentes para las emisoras comerciales.

La autoridad australiana de comunicaciones anunció que investigará la difusión de la broma telefónica realizada por la emisora 2Day FM sobre el estado de salud de la duquesa Catalina y que terminó con la muerte de una enfermera británica. 


La Autoridad Australiana de Comunicaciones y Medios (ACMA, por sus siglas en inglés) utilizará sus poderes discrecionales para abrir, por iniciativa propia, esta investigación formal, según un comunicado de este organismo regulador.


La investigación se centrará en analizar si la emisora violó los requisitos de su licencia y las normativas vigentes para las emisoras comerciales, agregó la ACMA.


El director de la ACMA, Chris Chapman, aclaró que esta medida se adopta frente a la licencia y no contra los locutores Michael Christian y Mel Greig, quienes se hicieron pasar por la Reina Isabel II y el Príncipe Carlos en una llamada telefónica la semana pasada al hospital King Edward VII para conseguir información sobre el embarazo de la duquesa de Cambridge.


Esa llamada fue atendida por Jacintha Saldanha, quien pasó la llamada a un compañero del hospital que contó detalles sobre el estado de Catalina, y que días después fue hallada muerta en su vivienda en Londres, aparentemente por suicidio.


Max Moore-Wilton, presidente del grupo Southern Cross (dueña de 2Day FM) dijo que la empresa "cooperará completamente con todas las investigaciones", indicó la agencia local AAP.


La emisora aseguró que trató de contactar con el hospital varias veces antes de la emisión de la broma en antena, aunque no aclaró por qué lo hizo sin el consentimiento de los afectados.


Por su lado, el ministro australiano de Comunicaciones, Stephen Conroy, dijo que "es inapropiado que el Gobierno emita algún comentario mientras se llevan a cabo estas investigaciones" al destacar que la autoridad independiente debe efectuar sus pesquisas sin ningún tipo de interferencias