Conflicto en Egipto

Mursi, dispuesto a retrasar el referéndum con condiciones

El vicepresidente egipcio asegura que es rechazable que la oposición política exija la caída del régimen ya que esto viola la voluntad popular que eligió a Mursi como presidente de la República.

El vicepresidente egipcio, Mahmud Meki, afirmó este viernes que el jefe del Estado, Mohamed Mursi, está dispuesto a aceptar, con condiciones, un aplazamiento del referéndum sobre la Constitución, previsto para el próximo día 15.


En declaraciones a las ediciones digitales de los diarios Al Ahram y Al Masry al Youm, Meki dijo que "el presidente está dispuesto a aceptar el retraso del referéndum con la condición de que se blinde este aplazamiento de (posibles) recursos ante la Justicia".


Egipto es escenario de una división entre partidarios y detractores de Mursi, que esta semana derivó en choques junto al Palacio Presidencial, que dejaron seis muertos y centenares de heridos, y que ha desencadenado protestas en todo el país.


La tensión se originó después de que el presidente emitiera el pasado 22 de noviembre una acta constitucional por la que blindaba sus poderes y se agudizó con la convocatoria de un referéndum sobre la nueva constitución, previsto para el próximo 15 de diciembre.


Meki explicó que, según la ley, Mursi está obligado a convocar un referéndum en quince días, tras el fin de los trabajos de la Asamblea Constituyente.


De este modo -argumentó-, "las fuerzas que desean un retraso deben presentar garantías de que no recurrirán a la Justicia después de que el presidente lo decida (el aplazamiento) y de que no le acusarán de infringir la declaración constitucional", señaló Meki.


Esta tarde, la Comisión Electoral decidió postergar para el próximo miércoles el inicio de la votación de los egipcios expatriados, que estaba previsto que comenzara mañana, sábado.


Según la agencia oficial egipcia, Mena, la decisión responde a una petición del Ministerio de Asuntos Exteriores para que las respectivas embajadas y consulados puedan concluir los preparativos para llevar a cabo la consulta.


En cuanto al diálogo nacional convocado para el sábado por Mursi para buscar una salida a la crisis, Meki subrayó que la invitación está dirigida a todas la facciones y fuerzas opositoras.


"Se analizarán todos los asuntos para llegar a un entendimiento, pero hay líneas rojas en el diálogo, ya que no se puede derrocar la legitimidad ni exigir que el presidente se vaya", advirtió.


Para Meki, "es rechazable que la oposición política exija la caída del régimen, ya que esta petición supone una violación de la voluntad popular que eligió al presidente de la República".


Defendió el acta constitucional porque, en su opinión, "era necesaria", e indicó, además, que "el presidente está dispuesto a llegar a un entendimiento sobre este tema con las fuerzas políticas".


La oposición no islamista, unida en el Frente de Salvación Nacional, rechazó este viernes participar en el diálogo, al considerar que sus demandas no han sido escuchadas.


En un comunicado, el grupo explicó que la convocatoria de diálogo "carece de los elementos básicos de una negociación verdadera y seria e ignora las reivindicaciones principales del Frente", que son la anulación del acta constitucional y la cancelación del referéndum sobre la Constitución.


Esta organización está liderada por el premio Nobel de la Paz Mohamed al Baradei, el ex secretario general de la Liga Árabe Amro Musa y el excandidato presidencial Hamdin Sabahi.