Tras el escándalo

Máxima expectación ante la comparecencia sobre Libia de Petraeus en el Congreso

Su inesperada dimisión el pasado viernes tras reconocer una relación extramatrimonial puso en duda su comparecencia.

El ex director de la CIA David Petraeus comparecerá en el Congreso en una audiencia a puerta cerrada sobre Libia que ha generado máxima expectación y que llega una semana después de su renuncia por un escándalo amoroso. 


La prensa estadounidense reveló que los días previos a la salida del general retirado de la CIA estuvieron rodeados de tensiones con sus superiores sobre si la CIA debía romper su silencio sobre el ataque al consulado de EEUU en Bengasi (Libia) en el que murieron cuatro estadounidenses.


Según reveló el diario The Wall Street Journal, Petraeus quería publicar la cronología de los acontecimientos para contrarrestar las críticas contra la CIA, algo a lo que se opusieron tanto el Director Nacional de Inteligencia, James Clapper, como el Pentágono.


Petraeus había sido llamado a declarar como director de la CIA en las audiencias que se celebran esta semana a puerta cerrada, pero su inesperada renuncia dejó en suspense su comparecencia.


Su presencia es considerada vital por quienes apuntan que ni la CIA, cuyos agentes trabajaban en un edificio cercano para vigilar a los grupos de militantes, ni los militares estadounidenses que estaban en zonas cercanas actuaron a tiempo para evitar el ataque.


El secretario de Defensa de EE. UU., Leon Panetta, ha declarado que las Fuerzas Armadas estadounidenses no intervinieron rápidamente para repeler el ataque porque carecían de la información adecuada y señaló que el ataque se produjo tan rápido que no tuvieron "la oportunidad de saber realmente lo que estaba pasando".


Los congresistas quieren también aclarar con qué información contaba la CIA y el Gobierno, que en un primer momento atribuyó el ataque a una reacción violenta espontánea a raíz de un vídeo que ridiculiza el Islám, en vez de a un ataque terrorista.


Según el diario USA Today, entre las preguntas que tendrá que afrontar están si el presidente de EE. UU. Barack Obama conocían la naturaleza del ataque, quién tomó la decisión de no mandar ayuda militar o por qué no se utilizaron aviones no tripulados.


La Casa Blanca ha justificado esos cambios de versión como el resultado natural de la evolución de la información de inteligencia que fueron recibiendo, pero los republicanos acusan al Gobierno de "engañar" al pueblo estadounidense y de haber tardado demasiado en admitir que fue "un ataque terrorista".


Los senadores republicanos John McCain, Lindsey Graham y Kelly Ayote, han propuesto la creación de un comité especial del Congreso estadounidense, al estilo del que investigó en 1973 el escándalo Watergate, para investigar el ataque.


El presidente Obama asumió la responsabilidad por el ataque después de que lo hiciera en su nombre la secretaria de Estado Hillary Clinton al subrayar que su puesto incluye estar a cargo de controlar la seguridad en las embajadas de todo el mundo.


Clinton también testificará ante el Congreso sobre el ataque, según anunció la presidenta del Comité de Exteriores de la Cámara Baja, Ileana Ros-Lehtinen, en una audiencia abierta en diciembre.


El tema de las audiencias será Bengasi pero puede que en paralelo salga el asunto del romance de Petraeus con su biógrafa Paula Broadwell, quien podría haber tenido acceso a información clasificada sobre el ataque.


En un discurso en la Universidad de Denver en octubre, Broadwell comentó que el ataque al consulado fue obra de un grupo de libios que intentaba rescatar a prisioneros de guerra en un edificio anexo de la CIA y sugirió que Petraeus manejaba esa información, algo que la agencia de inteligencia ha rechazado.


En la audiencia del Senado también estarán presentes el Director Nacional de Inteligencia, James Clapper; el director interino de la CIA, Michael Morrel, el subdirector del FBI, Sean Joyce; el subsecretario de Estado para Gestión, Pat Kennedy y el director del Centro Nacional contra el Terrorismo (NCTC), Matthew Olsen.