Huracán 'Sandy'

"No nos dejan salir del campus"

El huracán ha obligado a suspender las clases en varios colegios y universidades. En el Babson College de Boston el hijo de un boltañés permanece encerrado por prevención.

"No nos dejan salir del campus. Todos los servicios de la Universidad –menos el comedor y Public Safety– han cerrado y en las noticias aconsejaron que compráramos velas para prevenir un corte de luz, pero en principio nos han dicho que no tiene que pasar nada, que estamos a salvo", cuenta Alex Agramunt Larraz -hijo de un boltañés afincado en Barcelona- que se ha mudado a la capital de Massachusetts un semestre con un Programa de Intercambio.


El huracán lo ha sorprendido este lunes en la Babson College de Boston, donde se han suspendido las clases ante la inminente llegada del huracán Sandy. "Nuestra RA (Resident Assistant) nos ha enviado un e-mail informándonos de cómo estar seguros aquí dentro", añade. Siguiendo las instrucciones que cuelgan por diversos carteles del campus y con los teléfonos, portátiles y demás dispositivos bien cargados, los residentes se preparan en sus habitaciones para pasar "lo más tranquilamente posible" el temporal.


"Nos aconsejan que cojamos comida y nos encerremos en casa para estar seguros", dice Alex ya preparado.

Se prevé que el huracán toque tierra en el estado de Massachusetts esta misma noche. Por el momento, los vientos fuertes que afectan desde primera hora de la tarde a la ciudad alertan ya de su llegada. "Aquí en la Universidad se han caído varios árboles y se van formando pequeños tornados que arrastran las hojas en círculos, como en las películas", explica Alex, que a estas horas tranquiliza a sus padres para que no estén preocupados.


Una amiga de la Universidad de Barcelona los ha visitado este lunes desde Carolina del Norte. Sorprendida por el temporal, ha tenido que hospedarse junto al resto de alumnos del Babson College. "También se ha dado el caso contrario: hay uno que se ha ido a Miami a ver a su familia y no ha podido volver", cuenta.


Los principales aeropuertos permanecen cerrados y el transporte público se ha suspendido a primera hora de la mañana. Las calles están semivacías, aunque los hay que todavía aprovechan para hacerse con las últimas provisiones. "Tenemos un amigo en Boston que se ha ido a comprar la cena y casi sale volando. Ya nos ha dicho que ha cocinado mucho arroz por si se va la luz", bromea.


Por su parte, Alex, lo tiene claro: "hoy toca día de pelis y series para no moverse de casa. Yo ya estoy cansado, me apetece tirarme en la cama", señala.