Huracán Sandy

Obama considera el huracán Sandy una amenaza

En varios países del noreste el país ya han declarado el estado de emergencia. Sandy podría tocar tierra la noche del lunes entre los estados de Maryland, Nueva Jersey y Delaware

El presidente estadounidense, Barack Obama, ha prometido este domingo facilitar la ayuda material para responder al huracán Sandy. Además, ha aprovechado para advertir a sus ciudadanos de que, debido a que se mueve con lentitud, "hay que tomárselo muy enserio". 


Tras una reunión con miembros de la Agencia Federal de Gestión de Emergencia (FEMA), el presidente ha pedido a la población que siga las recomendaciones de las autoridades, que en varios estados del noreste del país han declarado el estado de emergencia.


Obama recordó que ésta es "una tormenta seria y grande" y pidió a la población que se tome "muy en serio" la amenaza que supone "Sandy", que podría tocar tierra la noche del lunes entre los estados de Maryland, Nueva Jersey y Delaware. El mandatario, que se reunió con el administrador de FEMA, Craig Fugate, prometió eliminar los obstáculos en la concesión de ayudas y material y "dar la mejor respuesta posible a un sistema grande y complejo".


"Para cualquier cosa que necesiten, ahí estaremos. Necesitamos ayudarnos unos a otros", indicó el presidente.


En la reunión, Fugate subrayó que aún no se puede determinar dónde impactará primero el huracán, al encontrarse aún en el océano Atlántico. Para el presidente, esto pone en evidencia la necesidad de "responder rápido, en cuanto la información local empiece a llegar", de manera que se determinen las zonas que resulten más afectadas.


Obama no quiso comentar cómo afectará esta tormenta las votaciones por adelantado y la jornada electoral del 6 de noviembre en los estados del noreste estadounidense, aunque manifestó: "Vamos a seguirlo".