Aniversario real

La reina Isabel, 60 años al servicio de la Corona

Isabel II cumple seis décadas en el trono británico y celebra el aniversario este fin de semana con distintos actos y la popularidad por las nubes.

Imagen de Isabel II en un escaparate de Londres
La reina Isabel, 60 años al servicio de la Corona
EFE

Sentido del deber y pragmatismo han acompañado a Isabel II en sus seis décadas en el trono británico, aniversario que celebra este fin de semana con sus coloridos atuendos y una popularidad por las nubes.


La Reina de independentistas, aborígenes y casi 140 millones de habitantes de 16 naciones es, a sus 86 años, una empleada pública rica y famosa, que ha dedicado toda su vida al servicio de la Corona.


Conservadora, divertida, rígida, tímida, distante, práctica, sensible, observadora, tacaña o directa son algunos de los adjetivos que se achacan a esta mujer con salud de hierro a quien de niña llamaban Lilibet.


A pesar de su constante presencia mediática, poco se sabe de su personalidad y gustos más allá de que disfruta de los caballos, sus pequeños perros corgis, la vida en el campo y su gélida Escocia, donde se refugia todos los veranos.


Con ocasión de su Jubileo de Diamantes, se ha buscado humanizar su figura, a veces envarada, y se han divulgado un sinfín de vídeos familiares del pasado que han dejado entrever un lado más personal, además de fotos recientes en las que se la ve muchas veces riendo.


"En la intimidad es una persona muy divertida", dispuesta a "tomarte el pelo y a que se lo tomen", aseguró esta semana de la Reina el arzobispo de Canterbury, Rowan Williams.


Como corresponde a un monarca constitucional, la soberana inglesa casi nunca habla en nombre propio pero, cuando lo ha hecho, sus palabras han dado la vuelta al mundo.


Así ocurrió en 1992 cuando los divorcios de sus hijos, el incendio en el castillo de Windsor y verse obligada a pagar impuestos la llevaron a calificar ese año de "annus horribilis", o durante la crisis desatada por la muerte en 1997 de Diana de Gales, cuando se definió en un mensaje televisado como "Reina y abuela".


Veinte años después, la imagen de Isabel II es este fin de semana omnipresente en vitrinas de tiendas y pubs del Reino Unido y un 80% de los británicos confiesan ser monárquicos.


Millonaria en dinero, acciones, propiedades, joyas y obras de arte, Isabel Alejandra María Windsor nació en Londres el 21 de abril de 1926, hija del entonces príncipe Alberto y la aristócrata escocesa Isabel Bowes-Lyon, más tarde la popular Reina Madre.


Isabel II es reina de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, jefa de Estado de otros quince países de la Commonwealth y la soberana que, después de Victoria (1819-1901), más tiempo ha ocupado un trono de Inglaterra con mil años de historia.


Lo ha hecho junto al consorte también más longevo de la monarquía británica, su esposo el príncipe Felipe, nacido en 1921 y del que la joven Isabel se enamoró cuando se conocieron en una boda y ella tenía solo trece años.


Pese a constantes rumores de indiscreciones por parte del duque de Edimburgo, la reina de Inglaterra ha sido toda su vida mujer de un solo hombre, con el que ha tenido cuatro hijos, ocho nietos y dos bisnietas.


Isabel Windsor se casó con Felipe de Mountbatten en 1947, cinco años antes de llegar al trono el 6 de febrero de 1952 tras la muerte de su padre, el rey Jorge VI, coronado en 1936 por la repentina abdicación de su hermano, Eduardo VIII, enamorado de una divorciada.


Pese a ese vuelco del destino que la convirtió en heredera a los diez años, Isabel II es para muchos la mejor reina que ha tenido el Reino Unido, cuyo nombre ha promovido por todo el mundo con un centenar de viajes de Estado.


En su largo reinado Isabel II ha nombrado a doce primeros ministros, desde Winston Churchill a David Cameron, pasando por Harold Wilson, Margaret Thatcher o el indiscreto Tony Blair.


En sus memorias Blair rompió la regla de no desvelar detalles de las audiencias reales y relató su primer encuentro con la soberana tras ganar las elecciones de 1997, escena que parece inspirada en la película "The Queen" (2006).


"Fue bastante tímida, algo extraño en alguien de su experiencia y posición pero, a la vez, directa. No quiero decir maleducada o insensible -aclara-; simplemente directa: 'Es mi décimo primer ministro. El primero fue Winston. Eso fue antes de que usted naciera", le dijo Isabel II, según la recreación de Blair.