Una marea roja y blanca engalana el dance tradicional de Camporrells

Camporrells, y muchos hijos del pueblo recobrados por estas fechas festivas, se unieron ayer en el 'Ball dels Totxets', una antiquísima danza de bastones, para honrar a sus santos patrones, Abdón y Senén, con los que fueron en procesión por toda la localidad para dar comienzo a las fiestas mayores, que se prolongarán hasta el domingo.

Cada 30 de julio, caiga en el día que caiga, desde que en 1979 fuera recuperada esta antigua tradición, jóvenes y viejos -vivan donde vivan- dejan sus respectivas obligaciones y se acercan al pueblo para participar en este baile, con el que llenan de secos y rítmicos sonidos las angostas calles del pueblo, desde la zona del 'Molí de baix', punto del que parte la procesión, hasta el interior del templo, donde acaba esta demostración de folclore autóctono literano, el único que se conserva como tal, según lo describen los expertos del Centro de Estudios Literanos. El hecho de que este año la fecha haya coincidido con un viernes ha favorecido la participación, que ha rondado el centenar de 'totxetaires' o danzantes, casi más que público en las calles siguiendo la procesión y eso que son muchos los que se desplazan hasta Camporrells por la vistosidad del dance.

Como en años anteriores, los cuadros de danzantes -compuestos de cuatro 'totxetaires'- los encabezaban el alcalde de la localidad, José Guillén, y su pareja de baile Manuel Campo Vidal, que como impulsor de la recuperación de esta danza tiene ese privilegio, igual que otros de los vecinos que han trabajado durante las últimas tres décadas para que esta costumbre, que se perdió en los años cincuenta, volviera a reunir a los hijos del pueblo, aunque renovada, ya que los cuadros los forman tanto hombres como mujeres, ataviados con pantalón negro, camisa blanca y pañuelos y fajas rojas, con la diferencia de que los hombres llevan faja y el pañuelo atado a la cabeza y las mujeres van sin faja y con pañuelo atado al cuello.

Las doce de la mañana fue ayer la hora fijada para la salida de los danzantes desde la parte baja del pueblo hacia la plaza de la iglesia, donde esperan las imágenes de los patronos para ser portadas en procesión, precedidas por los 'totxetaires', que van ejecutando las danzas de 'La Cardelina', 'Las Tres Cruces, 'El Tralalá', 'El monte Carmelo' -que recuperaron el pasado año-, 'Cuando Barceló' y 'La Pastora', "casi un himno del pueblo", explicaba el alcalde de Camporrells, porque esta danza es propia de la localidad. Tras recorrer las calles de la localidad y volver a la plaza, circuito en el que se invierten unos veinte minutos, los 'totxetaires' entran bailando en el templo, donde se celebra misa en honor de los santos Abdón y Senén.

Los danzantes del 'Ball dels Totxets' se mostraban satisfechos de la respuesta de los aficionados, aunque, según admitía José Guillén "es muy difícil saber de antemano cuántos danzantes van a participar". Incluso, una vez comenzada la procesión, los organizadores no se aventuraban a dar una cifra, porque los cuadros se reúnen pocos minutos antes del acto para refrescar los distintos movimientos, dormidos en la memoria y el acervo cultural, ya que es un ritual que se remonta a los siglos XV-XVI, pero no olvidados.

Hoy continuarán los festejos con actividades para los niños, por la mañana, y, por la tarde, inauguración de una exposición de fotografías y presentación del Banco de Imágenes de Camporrells, seguida de la actuación del grupo folclórico Nuestra Señora de la Alegría, de Monzón, ya por la noche habrá sesión de baile, a partir de las doce y media. Mañana, domingo, se celebrará una misa concierto, con la actuación de la Coral de Binéfar, dirigida por Teresa Maza, en honor de la tercera edad y al párroco, Joaquín Nadal. Por la tarde, Los Titiriteros de Binéfar ofrecerán la obra 'Dragoncio' y se cerrará el programa con dos sesiones de baile.