al 2011

Red Eléctrica retrasa su decisión sobre el trazado que seguirá la línea de alta tensión

La compañía sigue sin responder las alegaciones de los 18 municipios que se oponen a la Peñalba-Monzón-Isona.

Una pilona de las que se colocaron para la Aragón-Cazaril sigue en pie junto a Pueyo de Marguillén.
Red Eléctrica retrasa su decisión sobre el trazado que seguirá la línea de alta tensión
P. U. C. A. E.

La compañía Red Eléctrica de España (REE) retrasa hasta el próximo año la presentación del anteproyecto en el que se conocerá el trazado elegido para la línea de alta tensión (400 kilovoltios) entre Peñalba, Monzón e Isona, ya en la provincia de Lérida. Estaba previsto que a finales de este año se sacara a información pública. Sin embargo, según informa la propia empresa, se pospone a principios del año próximo, aunque todavía no hay fecha concreta. Eso sí, el proyecto sigue adelante a pesar de la oposición social e institucional existente en Aragón.

Red Eléctrica ya ha informado de este retraso a Francisco Mateo, representante altoaragonés de la comisión formada por la Diputación Provincial de Huesca y de Lérida para hacer el seguimiento de este proyecto. El diputado preguntó recientemente al delegado regional para la zona de Ebro, José Ignacio Lallana, quien le comunicó la demora.

De todos modos, el retraso no significa en ningún caso que el proyecto de diluya. De hecho, la prueba de que sigue adelante son las mediciones del suelo encargadas a empresas de topografía que han estado sobre el terreno en las últimas semanas. Según Red Eléctrica, estos estudios se encargaron para elegir el trazado definitivo entre todas las alternativas que se barajan en el documento inicial que enviaron en noviembre de 2008 a todos los posibles municipios afectados.

Los ayuntamientos implicados, 18 entre Huesca y Lérida, ya presentaron sus alegaciones a finales de 2008 y están pendientes de conocer cuál será el trazado definitivo de una línea que aprovecha parte de la infraestructura de la antigua Aragón-Cazaril, que finalmente fue descartada después de que los tribunales dieran la razón a los vecinos de Torres del Obispo. Ahora, solo les queda esperar a la exposición pública del anteproyecto así como al correspondiente informe de impacto ambiental, que se conocerán a principios del año próximo.

Ese será el momento de todos los ayuntamientos para presentar sus alegaciones. Después de que hace justo dos años recibieran por sorpresa el citado documento con 16 alternativas para el trazado de la nueva autopista eléctrica, 9 ayuntamientos de la provincia y otros tantos de Lérida presentaron sus consideraciones, la mayoría por cuestiones ambientales.

A esas reclamaciones todavía no han recibido respuesta, dado que tampoco se trata del periodo de alegaciones que se abrirá realmente tras la publicación del anteproyecto. No obstante, la oposición es unánime. No solo se han opuesto los ayuntamientos afectados sino también la Diputación Provincial así como las Cortes de Aragón.

Es un proyecto que, para la Plataforma Unitaria Contra la Autopista Eléctrica que agrupa formaciones políticas de Aragón y Cataluña así como colectivos sociales, supone "resucitar" la antigua Aragón-Cazaril e incluso la Graus-Sallente, según el recorrido final que se elija.

El trazado desde Peñalba hasta Monzón, donde se construirá una subestación está claro e incluso un poco más arriba, hasta la altura de Fonz. Es la zona que coincide con la autopista eléctrica desestimada y de la que aprovecharán las pilonas que nunca se llegaron a retirar a pesar de la reclamaciones aragonesas tras la decisión judicial.

Después de que el 19 de mayo de 1999 se desestimara la Aragón-Cazaril, el 7 de octubre de ese año el Gobierno de Aragón acordó solicitar que se desmontaran las pilonas colocadas para el transporte de energía de la Aragón-Cazaril al mismo tiempo, se requería la Ministerio de Industria que, una vez anulada dicha línea hasta Francia, se retirara el anteproyecto de la Graus-Sallente que sería de conexión con otra línea. Sin embargo, las pilonas siguen en su sitio, a pesar de que REE (entonces REESA) ya cobró indemnización del gobierno francés por la anulación del proyecto. Ahora, el anteproyecto que se está acabando de perfilar, aprovecha esa infraestructura.