SUBDELEGADO DEL GOBIERNO SALIENTE

Ramón Zapatero: "A veces dan ganas, pero es difícil fijar el límite para cobrar rescates"

Se espera que en los próximos días el Gobierno central nombre al nuevo responsable en la provincia.

El subdelegado Ramón Zapatero será cesado en unos días después de siete años y medio.
Ramón Zapatero: "A veces dan ganas, pero es difícil fijar el límite para cobrar rescates"
JAVIER BLASCO

Tras la toma de posesión ayer del delegado del Gobierno en Aragón, Gustavo Alcalde, se espera en pocos días el nombramiento de los subdelegados provinciales. Ramón Zapatero abandonará entonces su cargo. Después de siete años y medio, ¿deja una provincia más segura?


Las cifras se mantienen estables. Desde hace varios años, tenemos entre 25 y 26 infracciones penales por cada mil habitantes. Si tenemos en cuenta que la media nacional está en torno al 45, podemos mantener que es una provincia segura. Pero acto seguido también añado que a la persona que sufre un daño de poco le sirven las estadísticas. Incluso la capital en estos últimos años ha estado en penúltima o antepenúltima posición en el ranquin nacional. De todos modos, hay que trabajar para evitar que se produzcan y las fuerzas de seguridad hacen un excelente trabajo en la provincia.


Con las oleadas de robos en pisos, explotaciones agrarias... ¿no cree que ha aumentado la sensación de inseguridad?


La sensación de inseguridad es difícil de combatir. Ahora hace tiempo que no tenemos oleadas, aunque en estos momentos puede dar esa impresión, las fuerzas de seguridad intentan atajarlas.


A algunos agricultores no les pareció suficiente y organizaron patrullas como hicieron en Tamarite de Litera, ¿qué le parece?


Entiendo el malestar que puede haber, aunque lo que se intenta es que lo resuelvan las fuerzas de seguridad o al menos que la actuación de los ciudadanos no interfiera. No obstante, insisto en que estamos en un nivel similar a los últimos años.


La singularidad de la provincia son los numerosos accidentes de montaña, ¿van en aumento?


No tengo los últimos datos. Tenemos una provincia maravillosa en naturaleza, por lo que muchas personas vienen a disfrutar y, en ocasiones, no se adoptan las precauciones suficientes. Dos veces al año hacemos una reunión con la excusa de dar los datos, pero sobre todo para que los especialistas aconsejen. Al menos en la provincia no se puede hablar de falta de información. Quiero resaltar el trabajo de la Guardia Civil pero también el convenio con el Gobierno de Aragón por el que hay personal sanitario del 061, un equipo que resulta muy eficaz.


Se ha abierto muchas veces el debate de si se deben cobrar los rescates, pero nunca se da el paso. ¿Cuál es su postura?


No lo tengo claro. A veces reconozco que cuando leo la información de las circunstancias de algunos accidentes que me remite la Guardia Civil, me dan ganas de eso, pero dónde se pone el límite de qué es una imprudencia y qué no. Es muy difícil porque tampoco queremos asustar a nadie y que por el miedo al cobro no den el aviso y la consecuencia sea peor. Sinceramente, no lo tengo claro.


¿Qué situación le ha sobrecogido más en estos años?


Son los agentes los que van ahí y lo sufren, pero sin duda cuando hay un muerto o un desaparecido. Además, a la Guardia Civil no se le olvidan estas circunstancias y los buscan periódicamente.


El jueves se cumplen 5 años del asesinato del alcalde de Fago, Miguel Grima. ¿Sufrió mucho hasta detener al culpable?


Sobre todo porque ningún asesinato tiene justificación y es algo fuera de lo razonable.


Pidieron su dimisión por la defensa de los policías de Jaca imputados en una presunta trama de drogas. ¿Su peor momento?


Por la información que tenía en ese momento es por lo que hice esas manifestaciones que hoy reitero. En cualquier caso, vamos a esperar (el caso está en proceso).


En estos años, al menos, no ha habido atentados en la provincia.


Aunque hemos tenido algún susto -dos, recuerdo-, hemos hecho una tarea preventiva muy buena. A veces ha habido quejas por las retenciones de los controles, pero siempre son un mal menor.


¿Qué consejos o qué asuntos le resaltaría a su sucesor?


No se me ocurriría darle ningún consejo, pero si quiere hablar conmigo, lo dejo a criterio de quien venga. Ya he pasado por esa situación con anterioridad y lo henos resuelto muy bien. Le haría mi opinión de algún tema de interés, pero me lo reservo para decírselo directamente.


¿Se le queda algo pendiente?


No, esto es una unidad administrativa que funciona permanentemente y muy bien. Una de las satisfacciones que tengo es haber trabajado con las personas que están aquí habitualmente.


No todo es seguridad. Supongo que le hubiera gustado irse con las autovías más avanzadas...


Me voy satisfecho porque se ha avanzado mucho en infraestructuras. Quiero recordar al ex secretario de Estado, Víctor Morlán, que se ha preocupado mucho por su desarrollo, a pesar de los reajustes de la crisis. Además, está en construcción Montearagón, San Salvador... No obstante, no creo que haya que entrar en detalles, pero también se han puesto en marcha planes contra el consumo de drogas y la mejora de la convivencia en centros escolares con muy buenos resultados. Además, se ha mejorado mucho la viabilidad invernal...


Con los ajustes del Gobierno, ¿entendería que se mermaran los efectivos de las fuerzas de seguridad en la provincia?


En estos años ha habido un incremento, ya que se sacaron miles de plazas. Gracias a eso nos hemos mantenido en cifras bastante buenas. El Gobierno hará lo que crea oportuno pero me gustaría que se pudieran mantener los efectivos.