HONGOS

La escasez de lluvias retrasa la temporada micológica

Antonio Palazón, presidente de la Sociedad Micológica del Alto Aragón, asegura que a pesar de la escasez de setas, se han encontrado ejemplares de gran valor científico.

Micólogos expertos han participado en las jornadas.
Ayerbe expone en su feria micológica 130 especies de setas a pesar de la sequía
J. S. B.

"La temporada de setas está siendo muy mala y podemos decir que comienza ahora, que han caído las primeras lluvias. En las zonas de menos altura podrán encontrarse algunos ejemplares. Si no llegan las heladas tempranas y van pasando los días, cada vez se pondrá mejor". Son las palabras de Antonio Palazón, presidente de la Sociedad Micológica del Alto Aragón, quien participó este fin de semana en las XXI Jornadas Micológicas celebradas en la localidad oscense de Ayerbe. De momento, las predicciones meteorológicas apuntan a que seguirá lloviendo y las temperaturas serán suaves, por lo que en la Hoya de Huesca, en principio "se podrá salvar la campaña", tal y como apunta Palazón.


Lo tienen más difícil, sin embargo, en la montaña. "En las zonas de altura, como los Pirineos, es probable que la temporada se termine muy pronto o no llegue ni a empezar", explica el micólogo, quien piensa además que esta circunstancia puede atraer a más visitantes a la comarca de la Hoya. "Hay gente que es mucho de sus zonas y que se mueve muy poco, pero hay otra gente a la que no le importa hacer kilómetros para coger setas y más en un año como este, en el que se tienen más ganas a causa de que está siendo un mal año", afirma el micólogo.


A pesar de esta escasez de hongos en los montes de la provincia, se han podido encontrar, sin embargo, ejemplares que Palazón calificó como "de alto nivel científico" para los expertos. "Hemos tenido la suerte de encontrar especies muy poco citadas tanto en España como en Europa. Quizá se debe a que ahora estamos poniendo más afán en buscarlas y por eso mismo lo estamos logrando", subrayó el micólogo oscense.


Palazón es además el encargado del Puesto de Información Micológica que se encuentra operativo en la localidad de Ayerbe hasta el próximo 6 de noviembre y donde los excursionistas pueden acudir para mostrar el contenido de sus cestas y comprobar si todo lo que han recogido es o no comestible. "Intentamos educar a la gente para que, si tienen la necesidad de acudir al puesto de información, cojan tan solo una pequeña muestra de cada hongo y siempre ejemplares enteros, para que podamos ver todas sus características, ya que tendrán que tirarlas si las cogen en grandes cantidades y resulta que no son comestibles", afirma el micólogo. "El puesto está para eso, para evitar intoxicaciones y más de una, doy fe de ello, se ha podido evitar", añade el experto.


Nuevas tecnologías


Según cómo se mire, las nuevas tecnologías no están siendo, por otra parte, una buena compañía para los rastreadores de setas más tradicionales. Y es que, los sistemas de localización GPS han desvelado ya, en muchas ocasiones, los secretos del saber popular. "El GPS está muy bien, pero en este mundo está haciendo un poquito de daño, porque marcas una ubicación y al momento estás en ella y el monte se acaba masificando. La gente llega allí sin ningún tipo de mérito y en ocasiones, acaba destrozando el terreno", lamenta Palazón.


Resulta importante, de la misma forma, respetar el proceso de maduración de cada especie, con el fin de que pueda seguir reproduciéndose para la siguiente temporada. "Si no dejamos que una seta suelte sus esporas y la vamos castigando progresivamente, las localizaciones en las que se encuentra acabarán por desaparecer. Y eso es algo en lo que tenemos que insistir".-