SALUD

El Hospital San Jorge ha puesto en marcha un área para atender a enfermos con ictus

El servicio está en la sexta planta y cuenta con tres camas monitorizadas y atendidas por personal externo

El Hospital San Jorge de Huesca ya dispone de un dispositivo específico para proporcionar asistencia a los pacientes que sufren ictus. Ubicada en la sexta planta del centro, el Área de Ictus cuenta con tres camas monitorizadas donde los enfermos reciben una atención inmediata y constante con el objetivo es reducir la mortalidad y las secuelas para mejorar la calidad de vida del afectado.


La puesta en marcha efectiva del servicio tuvo lugar el pasado 16 de marzo cuando llegaron los primeros pacientes. Justo entonces se cumplía un año de la presentación oficial de la Estrategia de Ictus del Ministerio de Sanidad que fijaba hasta 2011 el plazo de evaluación para poner en marcha áreas de tratamiento. Durante estos doce meses un equipo multidisciplinar ha hecho un trabajo intenso para dar forma al protocolo y disponer el servicio.


Segunda causa de muerte

La importancia de este nuevo dispositivo sanitario es vital si se tiene en cuenta que el ictus o infarto cerebral es la segunda causa de muerte en Aragón en términos generales, la primera en el caso de la mujer y la tercera en los varones, según apuntó María Bestué, neuróloga y coordinadora del Área de Ictus del Hospital San Jorge. Además, esta enfermedad cerebrovascular es la primera causa de discapacidad y la tercera de demencia, “provoca más discapacidad y muertes prematuras que el Alzhéimer y los accidentes de tráfico juntos”, añadió Bestué. Tres mil aragoneses sufren cada año un ictus, de los que más del 60% fallecen o quedan con discapacidad, según los datos de la Sociedad de Neurología.


Atención inmediata

Hasta ahora solo en el Hospital Miguel Servet y en el Clínico de Zaragoza, existían Unidades de Ictus, a las que eran trasladados todos los pacientes, una vez activado el denominado ‘Código Ictus’. La puesta en marcha en el Hospital San Jorge del Área de Ictus evita desplazamientos y permite una asistencia más inmediata, algo vital para la recuperación del enfermo. Dispone de tres camas monitorizadas donde el paciente tiene permanentemente controladas sus constantes lo que consigue disminuir la mortalidad, las complicaciones y mejorar su calidad de vida, según María Bestué. Allí es atendido por un equipo de neurólogos y personal de enfermería con formación específica. Una vez transcurridas las primeras 72 horas (tiempo máximo de permanencia en el área de monitorización) desde que ha sufrido el ictus, el enfermo es traslado a planta de hospitalización donde se le sigue el diagnóstico y tratamiento. Posteriormente pasa rehabilitación que, bien se realiza de forma ambulatoria si el paciente puede regresar a su domicilio y es seguido por los profesionales de Atención Primaria, o se traslada al Hospital Provincial. “Se trata de que el enfermo tenga continuidad asistencial en todas las escalas de su proceso, desde que ingresa en el hospital hasta su rehabilitación”, apuntó Bentué.


La especialista aclaró que en Área de Ictus del Hospital San_Jorge los cuidados son similares a los que se dispensan en las unidades que existen en el Miguel Servet o el Clínico, “la diferencia es que aquí no hay neurólogo de presencia física 24 horas”, dijo. Esto implica que, por el momento, no se pueda aplicar tratamiento de fibrinolisis. “Esta previsto que en una segunda fase, posiblemente antes de final de este año, tengamos el servicio de Teleictus conectado con las Unidades de Ictus de Zaragoza. Se trata de un servicio que permitirá que un neurólogo del Servet o del Clínico haga la exploración del paciente por videoconferencia lo que permitirá aplicar así la fibrinolisis. Mientras que de los cuidados en la fase aguda del ictus pueden beneficiarse el 80 % de los pacientes, el de la fibrinolisis solo a un 10%, pero es un tratamiento vital que logra disolver el trombo y dejar libre la arteria.

Con el Área de Ictus en marcha se pretende lograr entre los pacientes que lleguen una supervivencia mayor del 85% en el primer mes.