HUESCA

El barrio de María Auxiliadora ha realizado este año más de 600 actividades

Cursos, actos relacionadas con el medio ambiente y campañas solidarias, forman parte del programa anual de este barrio.

Una de las actividades que la asociación organizó con los Bomberos
El barrio de María Auxiliadora ha realizado este año más de 600 actividades
ASOCIACIÓN DE VECINOS MARÍA AUXILIADORA

Han hecho memoria y los las cifras no se les han quedado pequeñas. El barrio de María Auxiliadora de Huesca ha organizado en lo que va de año alrededor de 600 actividades, un número similar al de las realizadas el año pasado, para las que se utilizó, en mayor medida, la sede vecinal de la plaza de Cruz Roja. En el torreón de la plaza Puerta del Pirineo, tuvieron lugar, por otra parte, medio centenar más de actos. Así se dio a conocer durante la reunión de la junta rectora esta semana. «Resultaría muy largo detallar todas las actividades realizadas en ambos locales, aunque podríamos dividirlas en tres grandes grupos: las que tienen que ver con la concienciación, las de reivindicación y las solidarias, tanto relacionadas con nuestro entorno como con aquellos que nos rodean», explica la representante de los vecinos, Carmen García.


De esta forma, se han celebrado en el barrio días como el Día Internacional de la Mujer o el Día Internacional de Lucha contra la Violencia de Género. Se han sumado también a la recogida de tapones para conseguir una silla de ruedas para Aitana, la niña sevillana enferma de artesia pulmonar; colaboran también con la ONG Entarachén-Vols, vinculada con el colegio salesiano de Huesca y dedicada a la recaudar fondos para frenar la hambruna del ‘Cuerno de África’. De la misma forma, también se recogen alimentos para el proyecto solidario oscense Amigo Invisible. También es bienvenido el aceite para su reciclaje y para que los vecinos conozcan mejor la zona de la ciudad en la que viven, nada mejor que participar en la actividad dirigida a toda la familia, ‘Los árboles de mi barrio’. Para los más mayores se celebra además el festival ‘Garrampa Pop’, que cuenta con la colaboración de jóvenes grupos oscenses.


Las vacaciones de Semana Santa, la Semana Blanca y Navidad están dedicadas, por otra parte, a la realización de actividades para los más pequeños, «de tipo cultural, recreativo y medioambiental», recuerda la portavoz vecinal. El programa infantil incluye además la actividad ‘Cuentos no sexistas’, que viene realizándose desde hace tres años. Las fiestas del barrio, que tienen lugar la segunda quincena de mayo, son, por otra parte, para la portavoz vecinal «un espejo del trabajo de la asociación, desde la que se pretende representar a todos los vecinos». También han pasado por el barrio de María Auxiliadora, grupos como los Titiriteros de Binéfar o la Ronda de Boltaña.

Un regalo para la alcaldesa

«La actividad reivindicativa también cabida en este barrio», recuerda asimismo Carmen García, «ya estamos preparando así un belén con esta intención y también un regalo de Reyes para la alcaldesa, con algunas de las demandas de este barrio». Fernando Elboj recibió ya en su día un libro sobre radiaciones electromagnéticas, en relación a la estación energética presente en el casco urbano de este barrio y cuya desmantelación han pedido los vecinos en numerosas ocasiones. También se le regaló un juego del Monopoly, con las calles del barrio y tarjetas en las que se hacía referencia a diversas demandas de los vecinos. El sucesor de este, Luis Felipe recibió, por otra parte, un bastón de mando, dado que Elboj se había llevado consigo el suyo.


Todo ello sin olvidar además la celebración de la Ponencia sobre Participación Ciudadana, en la que estuvieron presentes la mayoría de los grupos políticos oscenses, además del ciclo ‘Mujeres en política’, por el que han pasado las diferentes representantes de los partidos que actúan en la capital altoaragonesa. Estos días se está celebrando otro ciclo también protagonizado por mujeres influyentes en el ámbito oscense, ‘Mujeres que tienen algo que decir’. La última en intervenir fue, el miércoles, Arantxa García Carpintero, portavoz de Comisiones Obreras en Huesca.Los locales

En los locales de la asociación de vecinos de la calle de la plaza de Cruz Roja se llevan a cabo cursillos de diversas materias, como bolillos, guitarra o restauración. «También se ha hecho especial hincapié en la informática para personas de entre 45 y 50 años, para lo que se adquirieron cinco ordenadores y se instaló una red wi-fi», relata Carmen García.


Este espacio también se encuentra disponible para las reuniones de las diferentes comunidades de vecinos del barrio o incluso para celebrar cumpleaños. «Existen unas normas de respeto, como limpiar todo lo que se ha usado, reciclar los materiales utilizados y no consumir alcohol, de esta forma, las familias y los grupos de amigos que lo deseen pueden disfrutar así de un espacio común. Los donativos que recogen de esta actividad serán destinados, exclusivamente, a actividades de orden cultural, especialmente los dirigidos a los más pequeños», explica Carmen García. Este mismo espacio lo utilizan además asociaciones como Huesca en bici o Tres y Más, integrada por familias numerosas.


El Torreón de la plaza Puerta del Pirineo, cuyo interior alberga una ludoteca, ha servido de escenario, por otra parte, para la celebración de actividades en las que han participado el parque de bomberos de Huesca, Cruz Roja o el cuerpo de Policía Local. También se ha desarrollado en este espacio el ciclo ‘Otras culturas’ en las que se han conocido de primera mano aspectos distintos de la cultura árabe y africana. Otras actividades, como cuentacuentos o programas de sensibilización con los animales, en las que ha participado la asociación protectora Oscan, se han desarrollado, por otra parte, a pie de calle.

En busca de socios jóvenes

La Asociación de Vecinos de María Auxiliadora ronda a día de hoy los 600 socios, con ritmo en el alta de socios, en palabras de García, «satisfactorio y continuo». Sin embargo, echan de menos la incorporación de jóvenes de entre 18 y 25 años de edad a la asociación. «Se trata de una franja de edad difícil de enganchar a las actividades colectivas por distintos motivos, entre ellos una ausencia total en este barrio de tradición asociativa, que no se ha vivido hasta el momento ni en la calle ni en los hogares», lamenta Carmen García.-