GRAN SCALA

Compro tierra, pero con agua, para Gran Scala

De momento, mientras ILD cumple con los vecinos espera que el Gobierno de Aragón le corresponda para poder presentar el proyecto.

«Ya sales con el cheque, ¿no?», bromeaba ayer una vecina de Ontiñena con unos propietarios que acababan de firmar la prórroga de un año para el pago del suelo solicitada por la promotora International Leisure Development, que impulsa la creación del parque de ocio y juego Gran Scala. Pero el cheque tendrá que esperar al día 28, en el que los propietarios cobrarán 176.210 euros más -un 2% del precio de 1.098 hectáreas-. De momento, mientras ILD cumple con los vecinos espera que el Gobierno de Aragón le corresponda para poder presentar el proyecto.


No sirven de nada esas tierras sin energía, sin accesos y sin agua. Son las condiciones que la promotora ha pedido desde el inicio y que hoy no tiene aseguradas. «Tenemos dificultades políticas y medioambientales por el abastecimiento de agua y eso no facilita la integración del inversor», aseguraba ayer el abogado de ILD, Eduardo Aguirre. Por ello, insiste en la necesidad de reunirse con el consejero de Industria, Arturo Aliaga, para «negociar» estos suministros así como «algunas condiciones de la ley que son restrictivas y que no ofrecen garantías». Pero la reunión sigue sin fecha.


En el protocolo inicial que firmó la promotora con la DGA el 12 de diciembre de 2007, el Ejecutivo se comprometía a construir las infraestructuras de acceso al recinto y facilitar la gestión de suministros energéticos, eléctricos y de agua, gas o comunicaciones, entre otros puntos. Sin embargo, ILD asegura que no tienen garantías de disponer de agua. No obstante, «nosotros estamos tranquilos porque se diga lo que se diga, seguiremos adelante», apuntó Aguirre. Es más, «no conozco a nadie que vaya regalando dinero, por lo que tenemos la certeza de que está a punto de cerrarse», aseguró el representante en España Jaime Riera para despejar las dudas que planean sobre el proyecto, aunque no marcó plazos.


Pero la duda existe incluso para los 67 propietarios que renovaron su compromiso. «Tengo mis reparos, pero si es bueno para los jóvenes, por eso se hace», aseguró Ramón Oliveros. Uno a uno fueron firmando y los que se incorporan al proyecto lo harán hasta el 28. Entonces, se repartirán los cheques. Pero falta el agua.