ROBOS

Alertan de una oleada de robos en los aparcamientos de los barrancos de Guara

Desde Semana Santa se han producido seis en Colungo. Los ladrones rompen las lunas para entrar en los coches.

Acceso al aparcamiento del barranco de Fornocal, en la sierra de Guara, en una imagen de ayer.
Alertan de una oleada de robos en los aparcamientos de los barrancos de Guara
R. GOBANTES

Una oleada de robos en los aparcamientos de los barrancos de Colungo, en plena Sierra de Guara, ha puesto en guardia a usuarios y autoridades. Desde Semana Santa, según algunos vecinos de esta localidad, se han producido al menos seis, y todos ellos con el mismo 'modus operandi': los ladrones acechan párquines poco frecuentados, rompen las lunas traseras de los vehículos y se llevan todo lo que encuentran en el interior del coches.


El último suceso se produjo la jornada del miércoles. Un vecino de Monzón dejó su vehículo en el aparcamiento del barranco de Palomeras, a escasos tres kilómetros de Colungo. Era el único coche que había allí aparcado y cuando regresó a por él, después de cuatro horas de paseo, se llevó una desagradable sorpresa. «Me habían reventado la luna trasera y se habían llevado la documentación, las tarjetas y el dinero», relató.


Este hombre, que prefiere no dar su nombre, aseguró que denunció los hechos en Monzón, donde vive; pero que antes de irse del valle hizo una parada en Colungo para tomar un refrigerio y allí le alertaron de que no era el primero al que robaban.


El alcalde de la localidad, Jorge Rubiella, reconoció ayer que así es, que desde que comenzó la temporada de barrancos en Guara se había dado algún caso. El, personalmente, solo conoce un robo, pero recalcó que cuando se enteró alertó a la Guardia Civil para que intensificaran la vigilancia por estas zonas.


Según los vecinos, sí que se nota más presencia de los agentes de la Benemérita, pero aún así se siguen cometiendo robos. «La Guardia Civil realiza más controles, pero día que no suben? Parece que lo tienen estudiado», relató Pedro Palacio, del Mesón de Colungo. Este hostelero aseguró que él conoce de al menos seis casos de robo desde la pasada Semana Santa, hace menos de un mes. «Seguro que hay más porque yo solo sé de los afectados que luego han parado aquí, en el bar, y han comentado lo que les había sucedido», explicó.


Según estos testimonios, los robos se han cometido en los párquines de los barrancos de Palomeras y Fornocal, en los que la escasa afluencia favorece estas fechorías. «En el del Vero no, que es más grande y suele haber gente», especificó Palacio. Todos, además, se han producido de la misma manera. «Rompen con una piedra los cristales, abren el coche y se llevan todo lo que pueden», explicó. «Muchas veces valen más los cristales que lo que se llevan», añadió.


«Deberían poner carteles para avisar», recalcó el vecino de Monzón al que robaron el pasado martes, quien quiso denunciar públicamente su caso para que los deportistas que acudan a Guara, que ahora en primavera son muchos, tomen las medidas oportunas. También desde el Mesón de Colungo alertan de la situación a todo aquel que para en el establecimiento. «Les recomiendo que no dejen nada a la vista en el coche», aseguró.


Solo en este valle


Algunos de los vecinos de la zona aseguran que la historia no es nueva, que ya ha ocurrido otros años. Sin embargo, se centra solo en este valle. En Bierge, su alcalde, Sergio Ferrer, informó que «no hay incidencias. En Colungo y Lecina siempre hay más problemas». Cree que su valle «es una zona más concurrida, a Rodellar va mucho escalador y además los coches se dejan casi al lado del pueblo» por lo que ello ahuyenta a los cacos.


Tampoco en el municipio de Alquézar se han registrado incidentes, aunque desde la empresa Avalanchas, dedicada a los deportes de aventura, aseguran que en los aparcamientos periféricos como los de Fornocal o Palomeras suelen darse casos de robos todos los años a principios de temporada porque «hay menos vigilancia y poca gente».