El último trimestre del año es muy dado a la celebración de numerosas convocatorias gastronómicas en Zaragoza y en el resto de la comunidad autónoma. Una de las más novedosas, que se puso en marcha el pasado 22 de octubre y estará vigente hasta el 22 de diciembre, pone en común algunas de las tapas más reconocidas del Tubo de la capital aragonesa. Cuatro establecimientos conforman la Ruta Clásicos del Tubo: Casa Pascualillo (en la calle de Libertad, 5); Bodegas Almau (calle de Estébanes, 10); Taberna Triana (calle de Estébanes, 7) y Haciendo Familia de Bodegas Almau (antiguo El Ensanche), ubicado en la calle de Santa Cruz, 2, en la esquina con la calle de Méndez Núñez. Cada uno de ellos ha incluido dos propuestas en la ruta, que se pueden combinar con una copa de vino de Aldeya, marca avalada por la D. O. Cariñena y que sale de la bodega Pago Aylés, en Mezalocha.

Así, Casa Pascualillo, uno de los establecimientos más veteranos de Zaragoza, propone degustar su tradicional croquetón de jamón y pollo o su no menos popular guiso de toro.

Bodegas Almau, otro de los locales con más raigambre del Tubo y de la capital, incluye en la ruta una de las propuestas más solicitadas a partir de su producto estrella: ‘Dulce de anchoa’, un montadito con anchoa, crema de queso y virutas de chocolate. La otra es el ‘Vegetal’, consistente en un pincho que ensarta rodajas de salchichón y chorizo. Su establecimiento hermano, el Haciendo Familia de Bodegas Almau, propone degustar el ‘Cojonudo’, un huevo frito sobre pimiento verde y jamón, y el calabacín con morcilla.

Por último, la Taberna Triana incluye en la ruta dos de sus montaditos más tradicionales: el de arenque y el de longaniza.

Quienes sellen el folleto de la ruta en los cuatro locales entrarán en el sorteo de varios regalos de Pago Aylés.

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