Alrededor de la gastronomía japonesa se está produciendo un auténtico 'boom'. Lo que parecía una moda no para de crecer alrededor de argumentos diferentes, y el protagonismo cada vez mayor que tiene en Zaragoza es un buen ejemplo.

Los seis restaurantes Sakura de la capital aragonesa han sido durante muchos años, y siguen siendo, una buena rampa de lanzamiento para conocer sus productos y tradiciones. También se ha asentado alguna franquicia mirando de reojo a la gastronomía asiática, con propuestas de bufet libre a precio cerrado, donde el producto no sale precisamente bien parado.

Y lo más reciente, aunque lleva unos años creciendo, es el protagonismo del sushi y sus variantes, el sashimi, las tempuras, las algas y las salsas asociadas a estas preparaciones. Y al calor de ellas, establecimientos exclusivos con menús y combinaciones para probar un poco de todo.

¿Qué será lo siguiente? Pues ya lo estamos viviendo estos días en Zaragoza. Por una parte, la cocina japonesa aspira a subir un escalón de la mano de Bokoto (calle de Jerónimo Zurita, 19), un Japanese Sushi Club, donde se quiere mostrar la "auténtica y verdadera" gastronomía nipona. Abrió sus puertas el pasado viernes 25 de septiembre y su casa matriz está en Lérida. La capital aragonesa es la segunda parada, pero el proyecto aspira a dar el salto al resto de España.

La semana pasada también celebraba su fiesta inaugural Udon Noodle Bar & Restaurant (en la calle de Marceliano Isabal, 2), un nuevo establecimiento de esta franquicia que cuenta con otro ubicado en Puerto Venecia.

Los dos miran a Japón aunque con argumentos diferentes. El primero, poniendo el acento en la calidad exquisita del producto, especialmente del pescado (atún rojo, dorada, salmón, pez limón hamachi, corvina, anguila…) y el arroz. El 'sushiman' Alejandro Ríos tiene clara la apuesta: "Cogemos el pescado por la mañana, se limpia, se corta y se prepara para servirlo a mediodía. Y lo mismo por la noche, todo al momento y delante del cliente".Intensa formación culinaria

Para ser un maestro del cuchillo, Alejandro se ha preparado durante años, primero en Chile y luego en otros países, pero siempre al lado de buenos profesores nipones. Él trabaja en la barra, pero en Bokoto también se cuida la cocina caliente, que dirige Alfonso Villaescusa. Arroces, pastas, salteados, sopas y carnes como solomillo de ternera gallega que "demuestran que esta gastronomía va más allá del pescado crudo y el arroz", afirma.

Eso lo saben bien en la franquicia Udon, un término que significa fideo grueso. Los fideos son su especialidad. Los hay de distinto grosor acompañados de productos locales que "hacen muy reconocibles los sabores", comenta el socio fundador Jordi Pascual.

Él está convencido de que la introducción de los 'noodles' está siendo más rápida que la del sushi o el sashimi, "que han tardado en consolidarse". Su carta también incluye como novedad las 'izakayas', tapas de inspiración japonesa. Y en el caso del sushi, han apostado por los makis elaborados con fideos, prescindiendo del arroz.

En los dos establecimientos tienen argumentos para justificar esta especie de nuevo 'boom' por la gastronomía nipona. Jordi Pascual establece similitudes con la mediterránea: "Nos gusta el pescado, primamos la materia prima y no esconder los sabores originales; en definitiva, son dos cocinas saludables, algo que hoy en día valora mucho la gente".

Los chefs de Bokoto también ponen el acento en este aspecto: "Es una comida ligera y fácil de digerir, muy equilibrada en cuanto a los nutrientes y que en ningún momento se hace pesada". Lo dicho, dos modelos distintos alrededor de una filosofía parecida que buscan seguir explotando el filón de 'lo japonés'.

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