El pasado 5 de mayo, Pastelería Tolosana abrió una nueva tienda en la calle de Alfonso I, número 6, de Zaragoza. Está situada en una de las vías más transitadas de la capital, por la que a diario transitan miles de zaragozanos y de turistas de ida o de vuelta de la plaza del Pilar. A ellos especialmente va dirigido este coqueto local, que no tiene muchos metros cuadrados de superficie pero que ha sido acondicionado con buen gusto para que resulte agradable y funcional.

Ha sido bautizado Trenzarte Arte & Pastelería Tolosana, ya que además de los productos del catálogo de esta prestigiosa marca pastelera que se pueden comprar, ha reservado una de sus paredes para soporte de exposiciones periódicas de obras de jóvenes valores de la ilustración y pintura y de la narrativa.

"Queremos darle un nuevo contenido a esta tienda y para ello hemos destinado una parte para la promoción de jóvenes artistas, según los objetivos que ya nos marcamos en los certámenes de Ilustración Dulce y concurso de microrrelatos que venimos organizando desde hace dos años", señala Jesús Tolosana, uno de los propietarios y gerente de la empresa.

En esta etapa inicial de la nueva tienda se ha colocado al frente su sobrino Isidro Tolosana, representante de la nueva generación de la familia que ha pasado ya por una completísima etapa de preparación profesional, primero en la Escuela Hofmann de Barcelona y después en centros de formación de Roma y de París, además de estancias en establecimientos de cocineros y pasteleros de gran prestigio.Nuevas versiones de la trenza de Almudévar

En cuanto a los productos que se pueden comprar en esta nueva tienda, hay algunos exclusivos, además de los que ya figuran hace tiempo en el catálogo de esta firma pastelera. Entre los primeros, destacan nuevas creaciones y formatos de la Trenza de Almudévar, que ha dado fama y prestigio a Tolosana desde hace ya más de 20 años, en que consiguió la calificación de producto de calidad alimentaria por parte del Gobierno de Aragón.

Así, hay varias novedades en la categoría de trenzas frías: la Paradise –que lleva una mouse ligera de limón con manzana–, la Tonka –cuya masa está coloreada con chocolate y va rellena de una mouse de haba tonka y recubierta de un crujiente de chocolate–, la Lusitana –caracterizada por el sabor de su relleno, un ganache de vino Oporto, y por las semillas de amapola que salpican su masa– o la Sambala, que lleva chocolate caramelizado y mermelada de naranja. La oferta incluye además la trenza mascarpone, rellena de queso, y la sacher, que lleva mermelada de albaricoque y está bañada en chocolate.

Hay que destacar también las nuevas creaciones de cruasanes, que van rellenos y coloreados de chocolate y de compota de fresa.

En cuanto a la parte artística, la primera exposición está compuesta por las obras ganadoras y una selección de las finalistas de los I y II Certamen de Ilustración Dulce y del ganador, finalistas y una selección de los microrrelatos del I Concurso de Microrrelatos. "Estamos muy ilusionados con este nuevo espacio, en el que arte y pastelería se unen para el disfrute de los sentidos", apunta Jesús Tolosana.

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