Placer y disfrute gastronómico en la mesa

Cuando comemos ricos alimentos y bebemos vinos sugerentes con amigos o familares en torno a una mesa podemos obtener sensaciones muy placenteras. Pero si vamos un paso más allá y alcanzamos el disfrute, nuestro mundo interior crecerá y podemos ser más dichosos.

Está claro que hasta en las épocas de crisis -o con más motivo todavía-, como la que estamos pasando, el ser humano necesita evadirse de las preocupaciones para recuperar fuerzas físicas y mentales y poder seguir afrontando lo que nos depare la vida. Y da la casualidad de que el placer que nos proporciona una buena mesa, bien surtida de ricos alimentos, y a ser posible en buena compañía, sigue siendo algo bastante asequible para la mayoría.

No hace falta irse a un restaurante caro ni ponerse a cocinar en casa una cesta de productos adquiridos en una tienda gourmet. Aquí, en Aragón, sin ir más lejos, tenemos joyas gastronómicas de temporada que nos pueden hacer alcanzar la gloria gustativa a precios bastante razonables y, además, nos regalan prodigiosas propiedades que nos ayudan a mantener la salud y a luchar contra los males de la edad.

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