La Peña, un bar clásico de tapeo en Zaragoza puesto al día a precios de antes

La Peña es uno de esos bares de Zaragoza que sin llegar a la condición de santuario del tapeo se merece un homenaje y un reconocimiento al tesón y al trabajo bien hecho. Son casi 30 años los que lleva funcionando en la calle María Moliner, en una ubicación discreta, pero poblando cada día la barra de argumentos de ayer y de hoy trabajados con buenas materias primas.

Paco Solanas y Guadalupe Marco son los protagonistas absolutos en este bar. Al no ser muy grande, los dos se las ingenian para sacar adelante la faena que, especialmente, de viernes a domingo se les acumula y de qué manera. Su tapeo es tradicional. Se cuidan mucho los rebozados que tanto gustan en la capital aragonesa. Su versión del jamón con chorreras de Casa Juanico la bordan. Esta tapa y el taco mexicano son probablemente sus dos referencias estrella, las más demandadas. El taco, ya lo adelanto, es de los que pican pero a buen seguro que no hay muchos en Zaragoza de una calidad parecida.

Con mucho clasicismo y bonito se presentan las empanadillas, los pimientos rellenos, los rollitos de jamón y queso, las gambas orly, las salmueras… En fin, mucha tradición en la barra que con el paso del tiempo le ha ido haciendo hueco a propuestas más actuales. Es el caso del solomillo con camembert y cebolla caramelizada; la minihamburguesa completa de longaniza o el montadito de jamón con salteado de setas y cebolla crujiente aliñado con Pedro Ximénez. Montados hay unos cuantos y algunos curiosos como el de batida de pulpo o el de boquerón con sobrasada.

El fin de semana aparecen sobre la barra más de 30 propuestas diferentes, así que literalmente no queda un hueco libre. Y lo mejor de todo, a un precio más que competitivo. Apenas cuatro cinco de estas tapas llegan al euro. El resto, a 90 céntimos.

El picoteo en el bar La Peña se puede completar con raciones a precios, también, muy ajustados. La más cara (4 euros) es la de bacalao a la riojana, pero la mayoría no llegan o superan por poco los 3 euros. Hay menuceles (callos, madejas, morro…), patatas con tres salsas, gambas al ajillo, ensaladilla, mejillones tigre picantes o sardinas escabechadas. En este apartado sí que predomina la tradición.

El bar es pequeño y hacerse con una de las tres mesas que hay en el interior no es una tarea sencilla. Cuando no hace malo la terraza exterior supone un desahogo. En cualquier caso, con un poco de paciencia siempre se llega a la barra. En fin, un clásico que merece la pena redescubrir.

La Peña

María Moliner, 19. Zaragoza. Teléfono: 976 271 453 Horario: de martes a jueves, de 8.00 a 21.00. Viernes, hasta las 22.00. Sábados y domingos, de 11.00 a 15.00. Lunes, cerrado.Ver otros restaurantes recomendados.