Moscatel refrescante

Bodegas Aragonesas acaba de poner en el mercado un vino blanco sorprendente por su elaboración y por sus agradables resultados.

Solo Blanco Tiólico 2012
Solo Blanco Tiólico 2012

Técnicamente, atendiendo a conceptos aromáticos, la variedad moscatel de Alejandría es una uva de carácter terpénico y en tierras aragonesas se ha vendimiado siempre buscando potenciar los aromas característicos: a flores, frutas acarameladas y compotadas.


«Nosotros hemos adecuado la fecha de vendimia para obtener el perfil aromático diferenciador y hemos conseguido aromas tiólicos en esta variedad», señala Javier Baselga, uno de los enólogos de la bodega. Estos aromas los descubrieron en un momento concreto de su maduración, como consecuencia de un proyecto de investigación y desarrollo para la mejora de las variedades de uva blanca de la bodega.


Así, comprobaron que vendimiando entre cinco y ocho días después de la llegada de la madurez fisiológica a la baya, se obtienen aromas tiólicos (fruta fresca, hierba recién cortada, cítricos, boj...). El momento de madurez se produce tras la parada de carga de azúcar de la baya, aproximadamente a los cuarenta días del envero.


Tras la vendimia, la uva estuvo macerando durante cuatro horas para hacerse después el desfangado del mosto.

Los técnicos condujeron la fermentación alcohólica durante 15 días a temperaturas controladas, inferiores a 16º centígrados, y mantuvieron un especial cuidado para garantizar la protección del mosto frente al oxígeno durante todo el proceso de elaboración, con el objetivo de mantener los aromas tiólicos obtenidos.


Alegre acidez y frescura


El vino obtenido presenta un color amarillo pálido con tonalidades verdosas brillantes, muy significativas de su juventud.


Llevado a la nariz, sorprende por su alta y compleja intensidad aromática, con toques cítricos, limón, piel de naranja, frutas exóticas, pomelo, maracuyá y aromas de hierba fresca como el boj. «Son aromas limpios y potentes, con el carácter tiólico buscado», señalan los técnicos.


En la boca tiene una entrada suave y agradable y a su paso manifiesta una fresca y alegre acidez, en todo momento equilibrada con el alcohol, de forma que en ningún momento da la impresión de tener la graduación que presenta. Es un vino que aportará momentos muy agradables cuando llegue el calor, tanto para chatear en las terrazas como para acompañar los platos típicos estivales. El precio es también un detalle muy a tener en cuenta.


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