cumbre europea

Zapatero habló con Rajoy por teléfono nada más llegar a Bruselas

El presidente del Gobierno español en funciones habló con su sucesor en el cargo sobre los diferentes documentos que se barajan para reforzar la disciplina fiscal en la eurozona.

Zapatero, a su llegada a la Cumbre
Zapatero, a su llegada a la Cumbre
EFE

El presidente del Gobierno español en funciones, José Luis Rodríguez Zapatero, habló con su sucesor en el cargo, Mariano Rajoy, nada más llegar a Bruselas para coordinar con él la posición de España en la decisiva cumbre europea que se celebra en la capital belga.


Según han informado fuentes del Gobierno, Zapatero y Rajoy, que estaba a punto de regresar a Madrid desde Marsella (Francia), donde ha participado en la cumbre del Partido Popular Europeo, han conversado sobre los diferentes documentos que se barajan para reforzar la disciplina fiscal en la eurozona.


Rajoy ha tenido ocasión de comentar a Zapatero el contenido de las reuniones que ha mantenido con la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Nicolas Sarkozy.


El actual inquilino de La Moncloa y su sucesor, destacan las fuentes, han mantenido contactos constantes en los últimos días para consensuar una posición conjunta ante el Consejo Europeo, y coinciden en la necesidad de reformar los tratados para imponer estrictas reglas fiscales a los países de la zona euro y proteger la moneda común.


Ambos han acordado hablar directamente por teléfono cuando sea necesario hoy y mañana, cuando los Veintisiete celebran formalmente la que, en principio, es la última cumbre europea del año.


Fuentes del PP han explicado desde Marsella que Rajoy ha pedido a Zapatero que defienda que España sea uno de los países que, junto a Alemania, Francia e Italia, puedan bloquear en un momento dado una decisión del Mecanismo Europeo de Estabilidad, el fondo permanente de rescate que empezaría a funcionar en 2012.


Francia y Alemania proponen que las decisiones en ese fondo se tomen por una "super mayoría" del 85% -en función de las aportaciones de cada país al Banco Central Europeo- y Rajoy quiere elevar ese porcentaje al 90 para que España, que tiene una cuota en el BCE del 11,9 por ciento, pueda también bloquear las iniciativas.