ACTIVOS INMOBILIARIOS

Ibercaja se embarca en una operación de venta y posterior alquiler de sus oficinas

Esta modalidad ha sido ya utilizada por cajas y bancos nacionales para obtener liquidez.

Edificio central de Ibercaja en Zaragoza.
Ibercaja se embarca en una operación de venta y posterior alquiler de sus oficinas
HERALDO

Ibercaja se halla en un proceso de venta y posterior alquiler de una parte de sus oficinas. Esta operativa, conocida como 'sale & lease back', ha sido ya utilizada por bancos y cajas con el objetivo de convertir activos inmobiliarios en recursos monetarios y obtener así liquidez.


Según recogía ayer el diario digital 'El Confidencial', la caja aragonesa se plantea sacar a la venta un lote de 204 sucursales (en este momento cuenta en toda España con 1.076 oficinas) por las que estaría pidiendo un precio que rondaría los 144 millones de euros. La entidad aragonesa eludió ayer comentar esta operación, que está siendo coordinada por Deloitte.


La operativa de 'sale and lease back' ha sido utilizada en los últimos años por entidades financieras españolas para captar más de 3.000 millones de euros. Según un informe realizado por la consultora Aguirre Newman, hasta finales del pasado año, a través de estos mecanismos de venta de inmuebles corporativos y redes de oficinas y su posterior arrendamiento, entidades como BBVA, Banco Popular, Banco Pastor, Banesto, Banco Sabadell, Caja Madrid, Caixa Catalunya, Barclays o Caja Navarra han logrado fondos en un contexto de restricción de crédito internacional.


El 'sale and lease back' consiste en la venta de un activo de la empresa a una sociedad de leasing, realizando simultáneamente un contrato de arrendamiento financiero sobre el bien vendido. En la mayoría de los casos, además del contrato de alquiler pactado por un determinado periodo de tiempo, la entidad vendedora negocia la posibilidad de recompra de los inmuebles.


Esta modalidad de financiación alternativa ha sido menos utilizada en los últimos meses, ya que los fondos de inversión internacionales (que son los que pujan preferentemente por estas compras) están encontrando también dificultades para financiarlas.


En este sentido, una muestra de la situación actual de los mercados se ha visto con el retraso de la adjudicación de los concursos para privatizar la gestión de los aeropuertos de Madrid-Barajas y de Barcelona-El Prat, que se ha prorrogado tres meses más, hasta el 31 de enero de 2012. La ampliación del plazo se produjo a petición de las empresas interesadas en la puja, por las dificultades para reunir la financiación necesaria en la fecha inicialmente establecida.