PETRÓLEO

El temor a un nuevo recorte de la OPEP impulsa los precios del crudo

El temor a que la OPEP cierre más aún el grifo para impulsar los precios del petróleo se impuso al final de la semana a los malos datos económicos de EE. UU. y la zona del euro, lo que hizo repuntar el precio del crudo por encima de los 45 dólares en Nueva York.


El barril de crudo de Texas, referencia en EE. UU., se encareció un 4,4 por ciento y cerró la semana a 45,52 dólares el barril, el nivel más alto desde finales de enero. En Londres, el Brent se apuntó un 2,7 por ciento y se situó en 44,85 dólares, mientras que el crudo de referencia de la Organización de Países Productores de Petróleo (OPEP) se encareció 2,02 dólares -un 4,8 por ciento- y cotizó a 43,79 dólares por barril el jueves.


El secretario general de la OPEP, Abdala Salem El Badri, criticó a la Agencia Internacional de la Energía (AIE) por mostrarse favorable a que este año el barril de petróleo cotizase a 40 dólares, al asegurar que dañaría a la industria del crudo. "Los comentarios de la AIE son confusos y engañosos. Mientras se pide que los precios sigan en los 40 dólares, también se quieren inversiones que no son económicamente viables a esos precios", explicó.


La AIE aseguró que si el barril de crudo se mantuviera este año a unos 40 dólares, el mundo obtendría un billón de dólares como estímulo económico para salir de la crisis por los bajos precios.


El ministro de Energía y Petróleo de Venezuela, Rafael Ramírez, propuso recientemente un recorte del bombeo en la próxima reunión de la OPEP para estabilizar el precio en "al menos 70 dólares".


Arabia Saudí, el primer productor petrolero del mundo y la voz más influyente en la OPEP, aseguró a finales de 2008 que un precio "justo" para el petróleo serían 75 dólares.


Ante esta situación, el mercado entendió que el mensaje que les lanzaba el grupo es que en su próxima reunión ministerial en Viena el próximo día 15 la OPEP podría cerrar más las espitas.


El descenso en el consumo de crudo por la crisis económica ha favorecido un continuado alza de las reservas en los países industrializados y un abaratamiento del crudo, lo que ha llevado a la OPEP a recortar su oferta en unos 4,2 millones de barriles desde el pasado septiembre.


El mensaje del grupo petrolero pudo más en los mercados que los datos negativos de la economía estadounidense, que destruyó 651.000 puestos de trabajo en febrero y elevó la cifra de desempleo al 8,1 por ciento, un nivel que inédito desde hace 25 años.


Mientras, en el Viejo Continente, el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, aseguró ayer que la recesión será más dura y más larga de lo esperado. El Eurostat constató que el crecimiento del PIB en la zona del euro cayó un 1,5% en el último trimestre del 2008, debido a un descenso en la demanda interna y las exportaciones.


Por el lado de los anuncios positivos, las autoridades chinas aseguraron que el segundo mayor consumidor de petróleo del mundo, sólo por detrás de EEUU, muestra ya "signos de recuperación" ante la crisis, tales como "un repunte del consumo y la inversión".


El primer ministro, Wen Jiabao, había asegurado el jueves que China lograría crecer un 8% en 2009, el nivel mínimo para seguir creando empleo en el gigante asiático.