Mercado laboral

El sector agrario aragonés resiste la crisis económica

Se mantienen los puestos de trabajo. Desde UAGA aseguran que la burbuja económica no les ha afectado, pero sí hay problemas estructurales que "hay que solucionar".

El número de contratos agrarios en Aragón no solo se ha mantenido, sino que ha crecido desde el comienzo de la crisis. Según un estudio del ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, en diciembre de 2011 hubo 30.973 afiliados agrarios, casi 100 más que en el mismo mes de 2008.


“A nosotros la burbuja inmobiliaria no nos ha afectado, aunque sí la propia estructura del sector. Hay problemas específicos que tenemos que solucionar”, aseguró el secretario general de la Unión de Agricultores y Ganaderos de Aragón (UAGA), José Manuel Penella.


Recordó que en el sector se “han mantenido las cifras” y hasta hay un leve crecimiento en los puestos de trabajo, algo que “ya es mucho”.


Al comienzo de la crisis, 29.300 personas estaban dadas de alta en la Seguridad Social en una actividad relacionada con la agricultura en la Comunidad aragonesa y aunque en el tercer trimestre de 2010 hubo un pico de 39.600, a nivel global la cifra de contratos ha aumentado en torno a un 6% hasta el final de 2011 y según datos del INE.


Crisis como la del pepino no han evitado que los datos sean buenos, aunque varios involucrados piden mayor protección para que esas variables no determinen el devenir de los empresarios, que desde hace varios años reclaman reformas y exigen mayores ayudas.


Penella informa que el año pasado sí ha dejado menos autónomos, algo que para él cambiará gracias a la reforma de la Seguridad Social en el sector agrario, que pasará a contar con los mismos derechos que ya se reconocen en otros sectores.


El secretario general de UAGA reconoce que la temporalidad es alta, pero invita a la DGA a invertir en formación para que eso disminuya: “Si hay gente que está aquí entre mayo y octubre y luego se va a otras Comunidad cercanas para poder continuar trabajando, podemos formarlos en cosas como la poda o los tratamientos fitosanitarios. Las puntas seguirán, pero serán menores”.


Optimismo


Cuando el consejero de Economía y Empleo del Gobierno de Aragón, Francisco Bono, reconoció que el paro “seguiría aumentando” en Aragón, solo ofreció una invitación al optimismo, al reconocer y destacar el “buen comportamiento del sector agrario”.


El comercio de frutas, entre mayo y octubre, sigue generando la mayor cantidad de los puestos de trabajo. Aunque muchos hablan del cambio de perfil de los trabajadores, Panella asegura que “no ha cambiado mucho la gente que llega”, algo que él ve positivo e intenta incentivar.


En cuanto a regiones, Calatayud,  La Almunia de Doña Godina, Caspe, Alcañíz, el Cinca Medio y el Bajo Cinca son las que más producen.


“En esas regiones hay que potenciar y dar estímulos para que se consoliden los puestos de trabajo. Si no varían los trabajadores, con formación, se puede mejorar y mantener el número de empleos”; afirma Penella.