El consejero de Economía del Gobierno de Aragón, Francisco Bono, ha considerado que las cifras del paro no han tocado fondo y ha vaticinado que hasta que no mejore la demanda interna habrá repuntes "aislados".

En declaraciones a los medios en una visita a la planta de General Motors en Figueruelas, Bono ha matizado que sí se ha tocado fondo en las cifras importantes de paro, pero se seguirán produciendo "disgustillos" en los próximos diez o doce meses, hasta que no mejore la demanda interna.Un aumento del paro anunciado

Ha reconocido que esperaba un aumento del paro en septiembre porque el sector turístico no se ha comportado en verano como se esperaba, pero le ha sorprendido el número, concretamente 1.986 personas, lo que supone un 2,14 % respecto a agosto, con lo que el número total de parados en la Comunidad se elevó a 94.701.

Para Bono, este año y 2012 serán bastante planos y poco gratificantes para el empleo y habrá que esperar unos meses para ver si la situación se recupera.

Se ha referido también al paro registrado en Huesca, con un incremento del 8,09 % debido entre otros motivos a que el verano "no ha sido" bueno para el turismo y a que persisten los problemas de la construcción, y porque se dan "juegos estadísticos que deberían no tenerse en cuenta", al engrosar las cifras del paro personas que han estado ocupados en temporadas muy cortas.

"Estamos en una coyuntura plana, estancada, y es todo un efecto multiplicador", ha dicho Bono, quien ha compartido con el presidente de la Cámara de Comercio de Zaragoza y del Consejo Superior de Cámaras, Manuel Teruel, que la crisis ha terminado acabado pero, en su opinión, se tardará "más de lo deseable" en tener una senda de recuperación.Una crisis más larga de lo deseable

Para el consejero, el fondo de la crisis no va a ir a peor, pero "va a durar más de lo deseable", un tiempo que es impredecible, ha dicho, aunque a su juicio antes de un año no habrá una recuperación "clara" porque va ser difícil que fluya el crédito en estos meses y porque el entorno internacional "no está despejado".

No obstante, ha estimado que el simple cambio de Gobierno tras las elecciones del próximo 20 de noviembre, sea del signo que sea, puede infundir algo más de confianza en las familias y en las empresas para empezar a salir de manera un poco autónoma de la crisis, de este estado de "depresión colectiva", que para Bono es "excesiva".

En ese sentido, ha considerado que la bajada del consumo interno no está justificada en el "colchón" de rentas del país y radica en un problema de confianza que se debe superar "en cuento se pueda", y entre todos.