El éxito que Genuine Coconut está cosechando en los mercados, esencialmente internacionales, ha hecho que la empresa aragonesa no deje de crecer. Lo ha hecho ahora con la instalación de una segunda línea productiva con la que su planta situada en la localidad zaragozana de Pedrola aumentará su producción hasta casi triplicarla. De esta forma, la firma aragonesa que comercializa agua de coco, cien por cien orgánica y que puede consumirse en su envase natural y en cualquier momento gracias a su sistema de apertura abrefácil, pasará de producir 40.000 unidades a la semana a disponer de 100.000 cocos semanales listos para su comercialización.

Con esta nueva línea productiva, la inversión realizada por la empresa desde que comenzara su andadura en junio de 2015 suma ya los 10 millones de euros.

El objetivo de esta inversión no es otro que poder atender la creciente demanda y conquistar además nuevos mercados, señala Ana Molina, responsable de Comunicación de la compañía, que cuenta también con unas instalaciones en Tailandia, donde se cultiva de forma natural y orgánica la variedad Nam Hom (coco aromático), considerada la mejor del mundo por su calidad y su dulzor.

"Desde que ganamos el premio a la innovación en la feria berlinesa de Fruit Logistica nuestro producto ha despertado mucho interés y necesitábamos ampliar la producción para abastecer a supermercados de distintos países europeos que exigen mayores volúmenes de producto", señala Molina.

Genuine Coconut se comercializa en toda España, especialmente en Madrid, Barcelona, Málaga y Baleares, y su demanda "es cada vez mayor". La empresa exporta además al mercado europeo, en el que el Reino Unido es su principal cliente, donde trabajan directamente con algunas de las principales cadenas de distribución del Viejo Continente, así como con empresas especializadas en la distribución hortofrutícola. También comercializan su innovador producto en Dubái. "Ahora estamos centrados en estos mercados y en su consolidación", señala Molina, que explica que dado que el departamento comercial no ceja en la búsqueda de nuevos mercados, "a corto plazo" la compañía tiene previsto lanzarse a la conquista de Estados Unidos, Canadá y los Emiratos Árabes.

Incremento de plantilla

La empresa aragonesa emplea a 70 trabajadores en Pedrola, una cifra que se eleva hasta los 85 empleados con las instalaciones con las que cuenta en Ratchaburí (Tailandia). Una plantilla que se incrementará con la segunda línea de producción ahora puesta en marcha. De momento, sin embargo, la empresa se muestra cauta al hablar de una cifra de nuevos contratos porque, como asegura su responsable de Comunicación, el empleo se irá cuantificando en función de las necesidades que surjan cuando se cierren los contratos de pedidos.

Genuine Coconut surgió del impulso de Carlos Amorós, conocido empresario aragonés que dirigió empresas como Caladero y Pescados Caladero. Amorós conocía el auge que el agua de coco estaba teniendo en el mundo y quiso ir más allá, así que investigó hasta poder ofrecer un producto más natural y en un formato reconocidamente más innovador. Su agua de coco puede tomarse en cualquier momento y "tal como la naturaleza lo ofrece" es, decir en el propio fruto, al que se ha incorporado una anilla abrefácil, patentado por la empresa aragonesa y fabricada con la fibra reciclada de la propia corteza del coco y una resina natural.

Genuine Coconut ha cuidado al máximo el producto que lanza al mercado y "el exhaustivo control de la cadena de logística y frío". Pero también sus instalaciones, que cuentan con la norma mundial de seguridad conocida bajo las siglas BRC y ha conseguido además la calificación AA, que solo lucen actualmente el 12% de las empresas españolas del sector hortofrutícola.