​¿Cómo se vacía la hucha de las pensiones?

La conocida como "hucha" de las pensiones, o lo que oficialmente es el Fondo de Reserva de Garantía de las Pensiones, se vacía y preocupa seriamente a expertos económicos, a quienes hoy viven gracias a su pensión y a los actuales trabajadores que temen que peligre uno de los pilares del Estado de Bienestar.

En los últimos cinco años se han retirado más de 40.000 millones de euros y quedan 24.000 millones. ¿Cuánto durará lo que aún permanece dentro del Fondo?

Pues según las peores previsiones, si no se añade dinero se terminará en un año; teniendo en cuenta que aún quedan la paga extra de diciembre, las pensiones del 2017 y que el número de pensionistas se incrementa cada año.

En 2012 se retiraron 7.000 millones de euros; en 2013 fueron 11.648 millones. En 2014 más de 15.000 millones se extrajeron de la caja, en 2015 fueron 11.500 y en lo que llevamos de 2016 el Gobierno ha dispuesto ya de 9.700 millones. La "hucha" ha pasado de tener cerca de 70.000 millones de euros a sufrir una drástica reducción que complica la situación del Gobierno a la hora de transmitir calma a los futuros pensionistas.

Tras la última retirada de dinero de la Tesorería de la Seguridad Social, el valor del Fondo equivale al 2,24% del PIB y se sitúa en los 24.207 millones de euros (precio de adquisición); si bien el valor de mercado alcanza una cifra superior, 25.604 millones y equivaldría al 2,37% del PIB.

Si el Fondo de Reserva fue creado en el año 2.000 cuando España crecía al 5%, se creaban un millón de puestos de trabajo anuales y el sistema estaba sostenido por 20 millones de cotizantes a la Seguridad Social; ahora ese número se ha reducido a 17,5 millones y en los peores momentos de la crisis la cifra ha bajado hasta los 16 millones de cotizantes.

Para el Gobierno, esta retirada de dinero es por tanto "normal", porque sirve para "situaciones de contingencia y de emergencia" y se esfuerzan en transmitir "la más absoluta normalidad" ya que el Fondo ha servido precisamente para "salvaguarda" en los peores momentos de la crisis.

Las causas de estos "hachazos" a la caja son debidas a muchos condicionantes y no todos los economistas coinciden en el análisis del porqué y en las soluciones posibles. El hecho de que el Fondo pudiera vaciarse en 2017 será un duro varapalo para la tranquilidad de gobiernos, gobernados y para las Arcas públicas, pero no significa que los pensionistas actuales vayan a "perder" sus pensiones.

El problema se plantea más bien en cómo se pagarán las pensiones del futuro, la de aquellos nacidos en la década de los 80 o 90, o en cómo se va a ir reduciendo el poder adquisitivo de los pensionistas del 2030 ó 2040. Si los ingresos a la Seguridad Social, de donde se pagan las pensiones, han crecido un 0,8% en los últimos tiempos y los gastos, a pesar de congelarlas durante 4 años, han crecido un 3% el agujero crece y seguirá creciendo si no se inyecta liquidez.

En opinión del profesor de economía, Gonzalo Bernardos, el dinero para pagar a los pensionistas se acabará sacando "de algún sitio" ya que son una cifra importante de población y de posibles votantes. "Los políticos harán lo imposible para sacar dinero para las pensiones", sentenciaba Bernardos en declaraciones a La Sexta.

En opinión del profesor y economista José Carlos Díez, en un análisis sobre la situación económica manifestaba que "si no cambiamos nada habrá duros recortes en las pensiones públicas y en sanidad y educación". Estas declaraciones fueron recogidas por "Bolsamanía" antes de se retiraran 9.700 millones de euros más y dejaran la caja con un saldo de 24.207 millones.

José Luís Escrivá, autoridad fiscal independiente (Airef), en declaraciones a "El Confidencial" considera que la causa de está pérdida en las arcas públicas se encuentra "en la dificultad de reducir el déficit estructural", lo cual "tiene que ver con el hecho de que haya un sistema público de protección social, por lo que la Seguridad Social va a absorber el excedente de la hucha de las pensiones".

Para recuperar una economía saneada y salir del déficit, Díez siempre ha considerado vital poner "el acento en reformas que incentiven la productividad" mientras que para el también economista Daniel Lacalle es fundamental que no se incremente el déficit y "seguir la estela de Alemania o Irlanda". Ambos expertos se manifestaban así en un encuentro celebrado por Bankinter hace unos meses, aunque los dos comparten debates y tertulias con frecuencia y una visión poco común sobre las causas y las soluciones económicas.

Lo cierto es que para expertos económicos como el profesor Bernardos o el catedrático de Economía, José Maria O'Kean, uno de los principales problemas para los futuros pensionistas es que los ingresos aumentan menos que los gastos, lo cual supone una reducción "indiscutible" en la Seguridad Social.

En declaraciones a la Sexta, ambos expertos han coincidido en parte al explicar las causas por las que esta bañera se vacía con un amplio desagüe pero con un grifo que aporta insuficiente caudal.

Si el empleo aumenta, la pregunta es: ¿Cómo es posible que no suba la cantidad de dinero en la "hucha"? y las respuestas son varias: Por un lado, las personas que encuentran un empleo cobran bastante menos que aquellas que se jubilan. Los pensionistas son el 18% de la población y actualmente el 47% de los trabajadores cobran 967 euros o menos. "El problema no es la creación de empleo, que sí se está creando". En opinión de Bernardos es "lo de siempre. Los salarios bajos, ínfimos". Sale más dinero del que entra.

Otra de las explicaciones de porqué la "hucha" no se llena y se vacía en un momento de creación de empleo son las tarifas y bonificaciones básicas aplicadas a empresas y trabajadores autónomos, lo que suponen exenciones que reducen las cotizaciones a la Seguridad Social de manera significativa.

Lo que se planteó como un medio para fomentar las contrataciones y el autoempleo ha supuesto una reducción en el número de parados pero también en las arcas de la SS.

Según Bernardos, "si el año pasado se estimaba un déficit en la SS de 13.500 millones, este año será de 16.000". "Si estaba previsto que el déficit que aportara la SS fuera del 1,1%, acabará aportando el 1,4%, lo que es "un desastre" para el profesor catalán.

En lo que todos los expertos económicos coinciden es en que hay que tomar medidas. Según un informe de la OCDE en el que se analiza qué pensión puede corresponder según la década de nacimiento se recoge que: - A quienes hayan nacido en la década de los años 50 les corresponde cobrar poco más de un 73% en relación a su último salario. - Si la década es los años 60 correspondería el 60% del sueldo. - Los nacidos en la década de los 70 tendrían una pensión del 56%. - Aquellos que pertenecen a los 80' tendrán una jubilación que no superará el 50%. - Los de los 90' cobrarán menos del 49% de su último sueldo.

Para el catedrático O'Kean, "no se puede permanecer impasibles ante esta situación" por lo que está convencido que serán "decisiones políticas" las que se deben tomar y hacer un "planteamiento a medio plazo" para resolver la situación.

Deberán buscarse soluciones ingeniosas, que pueden pasar por varias alternativas o un conjunto de ellas como subir salarios y las cotizaciones a la SS de empresas y trabajadores. Para O'Kean también se puede destinar una parte del IVA a financiar pensiones, o parte del IRPF. El catedrático propuso ejemplos como que las pensiones de viudedad pudieran financiarse a través de Impuestos en lugar de con la caja de las pensiones.

Mientras tanto, cómo frenar el agujero de la "hucha" y llenar la caja de nuevo es el reto que tienen por delante políticos y expertos.