El Tesoro Público ha colocado 2.236 millones de euros en una emisión de letras a 3 y 9 meses y ha vuelto a ofrecer a los inversores intereses negativos en ambas referencias.

De esta forma, el organismo se ha quedado en la parte baja del rango, ya que esperaba captar entre 2.000 y 3.000 millones. La demanda, por su parte, ha sido alta y ha superado los 8.000 millones, casi cuatro veces lo emitido.

En concreto, el Tesoro ha vendido 285 millones en letras a 3 meses, aunque los inversores habían pedido 2.445 millones de este papel, 8,6 veces lo colocado, bastante más que en la anterior ocasión, cuando la demanda superó en 3 veces lo vendido.

Los intereses de este papel han vuelto a ser negativos, aunque han repuntado ligeramente respecto al mes de septiembre. Así, el tipo medio ha pasado del -0,111% al -0,081% y el marginal del -0,105% al -0,080%.

Por otro lado, el organismo ha vendido 1.951 millones en letras a 9 meses, aunque la demanda ha superado los 5.600 millones, 2,9 veces lo emitido, algo menos que en la anterior ocasión (4 veces).

En este caso, los intereses también han sido negativos, con un tipo medio del -0,006%, frente al 0,031% del mes pasado y un marginal del -0,005% frente al 0,034% de septiembre. Es la primera vez que el interés marginal de este papel se sitúa en negativo desde que empezó a emitirse en 2013.

Con la subasta de hoy, el Tesoro cierra las emisiones de octubre, un mes en el que ha colocado 14.399 millones en el mercado. En noviembre el organismo volverá a celebrar cuatro subastas, dos de letras y dos de bonos y obligaciones.

Aún así, el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, avanzó el pasado jueves que el Gobierno reducirá la emisión neta del Tesoro a 48.000 millones, frente a los 55.000 que se plantearon inicialmente y los 51.000 millones que estimó hace unos meses gracias a la mejora económica.