El Producto Interior Bruto de Aragón subió un 1,7% en 2014

La Rioja, Extremadura y Canarias, comunidades que más aumentaron su PIB en 2014, por encima del 2,1%


La economía española creció un 1,4% en 2014 gracias al empuje de todas las comunidades autónomas. La economía aragonesa repuntó un 1,7%, situándose por encima de la media de las regiones, de las cuales ocho registraron crecimiento por encima de la media nacional. 


La Rioja fue la que registró el año pasado un mayor crecimiento de su PIB en términos de volumen, con un avance del 2,5%, seguida de Extremadura y Canarias, con un crecimiento del 2,2% en ambos casos, según la Contabilidad Regional de 2014 publicada este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).


Estas tres comunidades superaron en varias décimas el crecimiento medio nacional de 2014. Pero no fueron las únicas. Otras cinco regiones presentaron tasas de crecimiento real de su PIB mayores al promedio español: Comunidad Valenciana (+2,1%), Navarra y Murcia (+2%), Baleares (+1,9%) y Aragón (+1,7%).


En total, ocho regiones experimentaron en 2014 crecimientos de su PIB superiores a la media nacional, mientras que dos de ellas, Cataluña y Castilla y León, igualaron el promedio del año (1,4%).


Las otras siete comunidades, más Ceuta y Melilla, crecieron en 2014 por debajo de la media. El menor repunte del PIB se dio en Galicia (+0,5%), seguida de la ciudad autónoma de Ceuta (+0,6%), Asturias y Melilla (+0,8%), Madrid y Cantabria (+1%), País Vasco y Castilla-La Mancha (+1,2%) y Andalucía (+1,3%).


El INE ha resaltado que diez comunidades autónomas crecieron el año pasado por encima del dato estimado para el conjunto de la UE-28 (1,3%).


Estadística ha atribuido el liderazgo de La Rioja en el crecimiento económico regional a la evolución de la industria manufacturera, "sensiblemente más favorable" que la observada a nivel nacional, y al buen comportamiento del sector servicios.


Por su parte, el PIB de Galicia, la región que menos creció el año pasado, se vio afectado en gran medida por el descenso en términos de volumen de valor añadido asociado a los sectores de industria, energía y construcción.