Competencia ve más anomalías en la subasta eléctrica de diciembre

Cifra en 392 millones de euros el sobrecoste.

La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha señalado que "no se observaron estrategias coordinadas" para subir precios en los mercados de futuro previos a la subasta eléctrica anulada en diciembre, aunque sí hubo algunas "anomalías" que confirman sus razones para proponer invalidarla.


Competencia ha publicado el análisis de los datos sobre los mercados a plazo (OTC y OMIP) en las fechas previas a la subasta eléctrica Cesur que se anuló a finales de 2013 y que "confirman y completan" las razones que llevaron a proponer esa invalidación de puja.


Competencia, que había requerido estos datos a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) para completar el informe publicado el pasado 7 de enero, detalla una serie de circunstancias tras analizar la negociación de uno de los contratos a futuros en diciembre, el denominado Q1-14 (en alusión al primer trimestre de 2014).


Entre esas circunstancias, Competencia señala elevados niveles de concentración en algunas posiciones, reducidas presiones a la baja o valores anómalos en algunos diferenciales y precios en estos mercados.


En el detalle del informe, el organismo señala que los agentes pudieron tener "incentivos a la elevación continuada de precios" de uno de los contratos cerrados, el denominado Q1-14, en estos mercados previos a la subasta.


No obstante, reconoce también que "no se observan estrategias coordinadas para la elevación de precios por parte de las empresas que acapararon mayores cuotas en las posiciones abiertas".


Asimismo, el informe analiza la diferencia entre los resultados de esas subastas y los precios del mercado mayorista para el primer trimestre y señala que si se hubiese validado la puja se habría generado un sobrecoste de 392 millones que se hubiera trasladado a los consumidores acogidos a tarifa.


Con todos estos datos, que "confirman y complementan las razones que llevaron a proponer la no validación de la subasta", el organismo tiene prácticamente cerrada su investigación sobre esta subasta.


El pasado 7 de enero, la CNMC publicó el informe en el que constataba la concurrencia de "circunstancias atípicas" en la subasta eléctrica anulada por el Gobierno a finales de 2013 pero evitaba hablar de manipulación.


El 19 de diciembre de 2013, la subasta Cesur para el suministro de electricidad a los hogares y empresas acogidos a la tarifa cerró con un encarecimiento del componente energético del 25,6 %, lo que, de aplicarse al recibo de la luz, se habría traducido en un encarecimiento superior al 10 %.


Ante esta situación, el Gobierno tachó esta subida de la luz de exagerada y pidió a la CNMC que investigara la subasta al considerar que había "una clara manipulación" y "falta de competencia", algo que fue inmediatamente rechazado por las eléctricas.


La respuesta de la Comisión fue la recomendación de la no validación de la subasta, por primera vez desde que se fijó este mecanismo para determinar las revisiones de tarifa, debido a "la concurrencia de circunstancias atípicas y en un contexto de precios elevados en el mercado diario durante las semanas previas".