Energía

Industria planea eliminar el precio máximo del butano

El Gobierno ha planteado al sector que el cambio en el método de fijación de los precios de las bombonas aprobado en marzo es solo la "puerta de entrada" a la liberalización total.

Sube el butano
Sube el butano

El Gobierno estudia liberalizar el próximo año por completo el mercado de bombonas de butano, lo que supondría que dejaría de existir un precio máximo regulado, con la excepción de una "bombona social", según el sector.


El mercado del gas licuado del petróleo (GLP) está liberalizado desde 1992, aunque desde entonces el Gobierno ha fijado un precio máximo al que se pueden vender las diferentes bombonas.


El objetivo del Gobierno, según José Luis Blanco, director general de la Asociación Española de Operadores de Gases Licuados del Petróleo (Aoglp), es proceder la liberalización total el próximo año, aunque se mantendría una "bombona social" con un precio regulado para las personas más necesitadas, como ya ocurre con la tarifa de último recurso (TUR) en la electricidad.


"Si hay una serie de personas que necesitan apoyo vamos a dárselo", ha defendido, con una bombona social para "los parados, las familias numerosas o los jubilados".


Sin embargo, ha considerado que el precio general debería "estar libre" porque "ahora mismo estamos dando una bombona social a todo el mundo", a un precio de 17,5 euros la tradicional de 12,5 kilos.


Ha admitido que probablemente eso supondría un encarecimiento de la bombona -que cuesta 29 euros en Portugal, 32 euros en Francia y 44 euros en Alemania-, aunque ha descartado fuertes subidas a corto plazo porque cada empresa tiene que competir con el resto, el gas natural y la electricidad.


Actualmente, el Gobierno fija un precio máximo para las bombonas de butano y propano, que se determina mediante una fórmula que toma como base la cotización del gas.


Desde marzo, este precio se establece cada dos meses, no puede subir ni bajar más de un 5 % en cada revisión y, además, la botella de butano de 12,5 kilos no podrá superar los 17,5 euros hasta marzo de 2014.


En caso de que la fórmula arroje un precio superior, como sucedió en la revisión de marzo, se reconoce el desfase y este se repercute en los meses sucesivos.


De hecho, en la revisión de mayo, el precio resultante para la bombona fue de 16,8 euros, pero se subió hasta el máximo de 17,5 euros para empezar a repercutir el desfase de los primeros meses del año, una compensación que continuará a lo largo del año.


Blanco ha alertado de un "peligro brutal" en este sistema, ya que actualmente funciona correctamente porque los precios de la materia prima son estables, "pero cualquier guerrilla que haya en no sé dónde" podría disparar el desfase.