El sindicato agrario UAGA ha registrado 3.000 alegaciones de agricultores y ganaderos de Aragón en contra del recorte de las ayudas públicas de la Política Agraria Común (PAC), correspondientes a las pequeñas explotaciones situadas en montaña o en zonas desfavorecidas.

El secretario de UAGA, José Manuel Penella, ha depositado en el registro de la consejería de Agricultura y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón un total de mil recursos, mientras que otros dos mil restantes se han registrado en las Oficinas Comarcales Ambientales de la Comunidad.

En declaraciones a los medios de comunicación, Penella ha explicado que los agricultores y ganaderos quieren expresar su protesta a través de este recurso, aunque desconocen si servirá para reactivar las ayudas, ya que están con la "soga al cuello".

"Ellos no pueden venir porque están con sus animales", pero quieren que protestemos ante este "hachazo" a las explotaciones "más débiles y vulnerables", con esta actuación que es sólo el inicio de un calendario de movilizaciones, ha apuntado Penella.

En total, alrededor de 7.000 explotaciones agrarias se han visto afectadas por la reducción de un 50% de media de la subvención de la Indemnización Compensatoria de Montaña (ICM); la Indemnización Compensatoria Básica (IBC) y la ayuda agroambiental.

Todas estas ayudas son cofinanciadas con fondos de la Unión Europea, en un 50 %, de tal forma que el Ministerio de Agricultura aporta el 25 % y la Comunidad Autónoma el otro 25 %, ha explicado Penella.

Sin embargo y, a pesar de estar recogida esta partida en los presupuestos de 2012, los solicitantes con derecho sólo han recibido el 50 % de la cantidad correspondiente, que deberían haber cobrado a finales del año anterior, porque la otra mitad se destinó a pagar lo correspondiente de 2011, ha indicado.

"Estando presupuestado y que ya no te fíes de los presupuestos la verdad es que ya no sé que nos queda. Podemos admitir la situación económica de todas las Administraciones, pero que se ensañen así hacia este sector, estando presupuestado, no es admisible", ha comentado.

El cobro de estas ayudas en la ganadería es todavía inferior, ya que, según ha precisado Penella, para este año sólo hay presupuestados seis millones de euros, es decir la mitad que en el anterior, y ya se ha destinado a "pagar la factura del año pasado", con lo que este 2013 "nada de nada".

"Y hablamos de modelos de explotaciones pequeñas en montaña, en zonas desfavorecidas, donde más han sufrido la sequía", ha añadido.

A su juicio, la gestión de la consejería ha sido "patética", ya que al no poner el 25 % correspondiente a la Comunidad en ayudas ICB (1, 5 millones de euros), no ha llegado ni el 25 % del Ministerio de Agricultura, ni el 50% de la Unión Europea.

"El Gobierno de Aragón se tiene que dar cuenta que esto un mal negocio", ha resaltado.

Entre los ganaderos aragoneses que han presentado este recurso se encuentra Joaquín Escartín, un joven de la comarca del Sobrarbe, una de las más afectadas, donde prácticamente la totalidad de los receptores- 200 de 260- han alegado.

Escartín al frente de una explotación de unas 70 vacas nodrizas, ha indicado que contaba con estas ayudas para trabajar, unos 3.000 euros por la ICB y otros 3.000 por ICM, porque son las "únicas" que recibe."Por un lado queremos mantener los pueblos, mantener juventud y asentar los pueblos, y por otro lado nos viene este recorte", ha concluido.