En septiembre de 2011, Hyundai lanzó el i40 CW, un coche que llegaba para continuar el éxito de otros productos de la marca que estaban cambiando el rumbo de la calidad percibida por los clientes. Curiosamente, el fabricante lanzó primero la versión familiar (CW). Ahora le toca el turno a la carrocería sedán, para completar una familia que logre seguir dando un espaldarazo a las cifras de ventas. Se comercializa ya con dos motores diésel (115 y 136 cv) y uno de gasolina, con tres niveles de equipamiento diferentes y con la posibilidad de elegir el cambio manual o el automático, si se opta por el motor diésel más potente.

La inspiración original del i40 puede remontarse al prototipo Genus de 2006. Presentado en el salón de Ginebra de ese año, ese prototipo representó la visión de Hyundai en Europa en el segmento D.

Aunque el exterior del i40 destaca por su «forma fluida y los característicos elementos gráficos, el diseño interior se centra en la integración escultural y optimizada desde el punto de vista egonómico de sus funciones», según Thomas Buerkle, diseñador jefe del Hyundai European Technical Centre.

El diseño deportivo del i40 no afecta negativamente a los niveles de confort interior, la versatilidad del habitáculo o a otros aspectos de utilidad o capacidad de carga. La amplia batalla (2.770 mm) y la anchura total (1.815 mm) crean un habitáculo de amplitud impresionante. El nuevo modelo ofrece a los ocupantes de los asientos delanteros unas dimensiones que son las mejores de su clase, según los responsables de la marca. La capacidad de carga del i40 es más que suficiente entre los competidores de su clase, con 505 litros de capacidad del maletero.

El nuevo i40 tiene líneas considerablemente más elegantes que los modelos anteriores de Hyundai, con valores optimizados de resistencia aerodinámica (0,28 Cd, para el Sedán) y mejoras en cuanto al refinamiento, prestaciones y ahorro de combustible.

Las funciones electrónicas de alta tecnología, según versiones, incluyen mantenimiento del carril de circulación y control de estabilidad con VSMS (frena la rueda trasera al entrar rápido en curva, si es necesario). También cuenta con conectividad, como el Bluetooth con reconocimiento de voz, navegación con detección vocal con mapa completo y cámara de seguridad de visión posterior, así como luces direccionables y sistema de sonido de alto rendimiento con altavoces Infinity TM.

Por lo que se refiere a confort y comodidad, el i40 está equipado con freno eléctrico de estacionamiento, asientos delanteros con ventilación y calefacción, así como un sistema automático de desempañado.

Unas avanzadas innovaciones de la iluminación exterior e interior, como los faros de luz diurna de serie con lámparas de xenón opcionales o un panel de instrumentos de LCD, refuerzan la posición del i40.

Otras tecnologías nunca vistas en Hyundai también aparecen en el i40, como un sistema que advierte a los conductores que circulan detrás que el coche tiene que realizar una parada brusca o el sistema de alerta por cambio involuntario de carril (disponible como opción en los GLS).