Hamilton lució en el casco una imagen del emblemático Cristo Redentor de Río de Janeiro y otra de la bandera brasileña, en el interior de la cual está escrito "Still I Rise" (Todavía me levanto).

La frase se ha convertido en un emblema para Hamilton, que tiene esas tres palabras tatuadas en su espalda, junto a una cruz de grandes dimensiones y unas alas que llegan hasta la lumbar del piloto.

No es la primera vez que el de Mercedes se inspira en la figura del brasileño para decorar su casco y reavivar la memoria del tricampeón mundial (1988, 1990 y 1991) de Fórmula Uno, fallecido en 1994, a los 34 años, en el circuito de Imola (Italia).

Conocido su fanatismo por Senna, el británico recibió esta semana un cuadro con la imagen del fallecido piloto pintado los artistas brasileños Los Kueios.

A falta de dos carreras, Hamilton se encuentra 19 puntos por detrás de su compañero de equipo y rival favorito, Nico Rosberg, quien obtendría su primer título mundial si vence este domingo en Interlagos.