Automovilismo

Protestas en Baréin contra la Fórmula 1

Más de diecisiete marchas se desarrollaron en distintos puntos de Baréin, la mayoría de las cuales derivaron en disturbios con la policía, que utilizaron bombas de sonido y gases lacrimógenos para dispersar a los participantes.

Distubios por la Fórmula Uno
Distubios por la Fórmula Uno
EFE

Las fuerzas de seguridad de Baréin se enfrentaron hoy a los manifestantes en una serie de protestas convocadas para exigir reformas democráticas y criticar el Gran Premio de Fórmula Uno que este fin de semana acogerá el país.


Más de diecisiete marchas se desarrollaron en distintos puntos de Baréin, la mayoría de las cuales derivaron en disturbios con la policía, que utilizaron bombas de sonido y gases lacrimógenos para dispersar a los participantes.


Los principales grupos de la oposición estuvieron al frente de una manifestación en la localidad de Tubli, al sur de la capital, en la tercera jornada de reivindicaciones previas a la celebración de la competición automovilística.


Al mismo tiempo, un grupo reducido de personas esquivó la fuerte presencia policial en el caso antiguo de Manama y protagonizó una marcha que rápidamente derivó en choques con los efectivos de seguridad en uno de los mercados de la ciudad.


Entre quienes se sumaron a las protestas, estuvieron algunos activistas como Zainab al Jawaya, hija del destacado activista bareiní Abdulhadi al Jawaya, que también posee la nacionalidad danesa y se encuentra en huelga de hambre desde el pasado febrero tras ser condenado a cadena perpetua.


Zainab, que fue detenida varias veces en los últimos meses, dijo que la policía está intentando ocultar sus peores tácticas contra los manifestantes debido a la fuerte presencia de medios de comunicación internacionales que se encuentran en Baréin para asistir a la carrera de Fórmula Uno.


Un número indeterminado de participantes en las protestas fue detenido, según denunciaron los activistas.


Grupos de opositores como los aglutinados en la coalición 14 de Febrero volvieron a reivindicar la introducción de reformas políticas y la liberación de los presos políticos, demandas que quieren seguir difundiendo de forma pacífica mientras dure el Gran Premio.


También se mostraron críticos con la decisión de la FIA de celebrar la competición de Fórmula Uno en Baréin, a pesar de que desde febrero de 2011 continúan las protestas contra el régimen que, según los opositores, está interesado en mostrar la vuelta a la normalidad del país al resto del mundo.


Algunas escuderías han comenzado a llegar a Baréin, si bien el equipo MRS, que tenía previsto participar en la prueba de Porsche Supercup -que acompaña la Fórmula Uno-, anunció hoy su retirada por cuestiones de seguridad.


Las autoridades han insistido en que están preparadas para el Gran Premio y asegurar la seguridad de los equipos y visitantes, mientras que la organización de la carrera considera que no hay riesgos en ese sentido.


La organización Amnistía Internacional, por su parte, difundió ayer un informe en el que apunta que las reformas prometidas en Baréin no se han implantado y que prosiguen las violaciones de derechos humanos.


Desde el inicio de las protestas en febrero de 2011, han muerto al menos 70 personas en Baréin, mientras que miles han sido detenidas y decenas condenadas a penas de prisión, de acuerdo a los datos de la oposición.


Baréin es un pequeño reino del golfo Pérsico, en el que el 70 % de la población es chií, aunque está gobernado por una monarquía suní.