No todos los días una competición española puede presumir de tener un campeón del mundo entre sus participantes. Sin embargo, la última prueba de la Liga LBR de BMX, que se ha disputado este fin de semana en Zaragoza, contó con la presencia del holandés Niek Kimmann, que fue el gran protagonista de esta última cita bautizada como ‘la carrera más bestia del año’. La sección de BMX del Club Pirineos celebró su quinto año organizando este certamen, con el honor de ser la única entidad nacional que se ha hecho cargo de su puesta en escena desde que vio la luz. El Pirineos redondeó el evento con la estrella Kimmann, toda una figura de esta especialidad acrobática que nació en California, que revolucionó el circuito de Pinares de Venecia. El holandés deleitó a todos los asistentes, no solo con su espectáculo sobre la bici en la pista, ganando sobradamente en la jornada del sábado y de ayer, sino atendiendo a todo el mundo que le pedía un autógrafo o una foto, sin dejar de sonreír.

Durante dos días, un total de 240 ‘riders’, representando a España, Francia, Portugal y Holanda, han dado espectáculo en el trazado zaragozano, que fue remozado con una nueva capa de tierra compactada. Otro aliciente más para los cientos de aficionados que se dieron cita en este evento, sin duda atraídos por la presencia de Kimmann, pero también para todos los pilotos que se jugaban el título final de la competición.

El oro mundial no defraudó y se llevó el triunfo en las dos carreras de la categoría Élite, con buena actuación en ambas del piloto del Club Pirineos Rubén Castro. Alejandro Alcojor (Los Pinos) confirmó su victoria final en la Liga LBR de BMX gracias a los dos terceros puestos de sumó este fin de semana. El certamen abrió el calendario en Alicante en febrero, y después recorrió Ricla (Aragón), Arganzuela (Madrid), Terrassa (Catalunya) y la gran final de Zaragoza.

El Club Pirineos volvió a ser un gran anfitrión de esta prueba internacional, con más de 30 participantes en la prueba que dejaron la pista en perfecto estado durante todo el fin de semana, y colaboraron para que el espectacular evento finalizara redondo. Niek Kimmann quedó "encantado" y regaló al anfitrión su jersey arcoiris autografiado.

La organización repartió 108 copas para los podios de los dos días de actividad, 90 medallas para los finalistas en las categorías de más pequeños y 57 placas para los tres primeros clasificados en la clasificación general.