Montañismo

Pauner, rumbo al Everest

El montañero aragonés ha iniciado su viaje para conquistar el Verest, la última montaña en su carrera para la conquista de los catorce ochomiles.

El alpinista Carlos Pauner, acompañado por Raúl Martínez, va a completar el proyecto 'Hacia las cimas del mundo', que consiste en ascender las 14 montañas que superan los 8.000 metros de altitud en el planeta, con una expedición al Everest, la montaña más alta del mundo, con 8.848 metros sobre el nivel del mar. Pauner ha iniciado este martes su viaje rumbo al Himalaya.


Carlos Pauner comenzó este proyecto "hace más de una década", en concreto, en el año 2001, cuando alcanzaba la cima del K-2. Un año después, el alpinista llegaba a la del Makalu. En la primavera de 2003, Pauner coronó la tercera montaña del planeta, el Kangchenjunga, y en el año 2004 ascendió dos nuevos 'ochomiles', el Gasherbrum I y Cho Oyu.


Dentro del proyecto 'Hacia las cimas del mundo', Pauner llegaba en 2005 al Nanga Parbat y en el 2007 al Broad Peak. En 2008, ascendió al Dhaulagiri y en el 2010 al Annapurna y Manaslu. Las últimas expediciones han sido al Lhotse, Gasherbrum II y Sisha Pangma.


El Everest se localiza en el Himalaya y marca la frontera entre Nepal y China. Pauner ha indicado que esta subida es "realmente difícil", pero "también por eso es un reto apasionante"


Pauner ha comentado que subirán a la cumbre del Everest por la parte de Nepal, porque es administrativamente más fácil. El día 15 esperan llegar a su primer campamento base, a unos 5.400 metros de altitud.


El alpinista aragonés ha apostillado que lo complicado de este reto es llegar a la cima sin ayuda de oxígeno, pero "esta es la forma de encarar un proyecto de estas características". Sólo el uno por ciento de las ascensiones al Everest han sido sin oxígeno.


Por su parte, Raúl Martínez ha concretado que, "si todo sale como esperamos", del 20 al 30 de mayo "esperamos alcanzar la cumbre". Los deportistas podrían estar de vuelta el día 5 de junio.


En este último reto, los alpinistas estarán acompañados hasta el primer campamento base por Carlos Sanz, de la Fundación que lleva su nombre, quien ha manifestado su alegría por participar en el proyecto.


La Fundación Carlos Sanz, entre otros objetivos, pretende promover la práctica del ejercicio físico, el deporte de competición y los hábitos de vida saludables en las personas con un órgano trasplantado, en lista de espera para ser trasplantados o con enfermedades relacionadas o derivadas de patologías asociadas al trasplante.


Carlos Pauner no ha querido concretar futuros retos una vez finalice este, pero "no descarto otros proyectos" que se centren en ámbitos "más desconocidos" para él que los 'ochomiles'.