Nordic walking

Jorge Vidal: "El parque Miguel Servet es ideal para la marcha nórdica"

El oscense Jorge Vidal se ha proclamado campeón de la Nordic Walking Champion Series.

Dos bastones adecuados, unas buenas zapatillas, adoptar la postura y el paso correctos, elegir una buena pista y… ¡A practicar ‘nordic walking’!. Y si se tiene verdadera pasión por este deporte: ¡A competir!. Así lo ha hecho el oscense Jorge Vidal, quien se ha proclamado campeón de la Nordic Walking Champion Series, la prueba más importante de este deporte a nivel nacional, celebrada en octubre en El Vendrell (Tarragona). “Comencé a practicar este deporte hace cinco años, de forma autodidacta. Fue en Benasque, cuando empezaba a introducirse en España”, relata Vidal.


Según explica, se trata de un deporte que cuenta con una modalidad de práctica destinada al bienestar y a la salud personal, apta para todo tipo de personas y otra más deportiva, de competición. “Yo siempre digo que es como practicar esquí de fondo sin nieve”, comenta el deportista oscense. Para practicarlo hace falta un calzado adecuado, con amortiguación, y unos bastones específicos, con empuñadura y un agarre especial para la mano. “Al caminar sujetando los bastones se ejercitan el 90% de los músculos del cuerpo y no solamente la parte inferior, como sucede cuando se camina o se corre”, explica.


Esta modalidad deportiva nació, relata Jorge, en Finlandia, al verse obligados los esquiadores de fondo a practicar sin nieve. En los ochenta comenzaría a desarrollarse en Estados Unidos, pero no será hasta finales de los años noventa, de nuevo, en Finlandia, cuando adquiera su nombre y sus características actuales, de la mano del experto Marko Kantaneva. Pronto se crearon nuevas técnicas y se popularizó también en otros países, como Alemania o Polonia, cuyos deportistas encabezan a día de hoy las clasificaciones a nivel mundial. En nuestro país, fueron comunidades autónomas como Cataluña o Baleares donde comenzó a popularizarse. Como asegura Vidal, un usuario puede llegar a alcanzar velocidades de en torno a los 8,5 kilómetros por hora, mientras que un deportista profesional puede llegar a superar los 10.


El terreno, como explica el campeón oscense, también influye. Así, cambia la técnica y el tipo de esfuerzo realizado cuando la prueba se desarrolla a cubierto y sobre una superficie que sea “lo más llana posible”, que cuando se utilizan desniveles, como en las competiciones alemanas y polacas, tiene lugar en una pista de atletismo o en el valle de Hecho, como una de las pruebas puntuables en 2010 a nivel nacional. Vidal tuvo que enfrentarse así a la arena de la playa tarraconense. “La superficie estaba compactada al comienzo de la prueba, pero no puedes decir lo mismo cuando, después de cinco vueltas, habían pasado por allí un centenar de personas, que han ido levantando la arena poco a poco”, relata el deportista oscense.

Por los caminos de Huesca

La capital oscense, recuerda Jorge Vidal, cuenta con sus propias pistas para la práctica de este deporte. Así lo indica la señalización presente en los caminos que llevan a las ermitas de Salas y Loreto, además de en las sendas que llevan a la fuente de Marcelo y en el entorno del río Isuela, a la altura del puente de San Miguel. Todo ello gracias al impulso que se ha dado a este deporte desde la Comarca de la Hoya de Huesca y la Diputación Provincial. “El parque Miguel Servet sería un terreno ideal para practicar la marcha nórdica”, indica Vidal, “es compacto y lo suficientemente blando para que te permita impulsarte con los bastones”.


El próximo año le gustaría, como asegura, participar en el campeonato del mundo que se celebrará en Austria, sobre una pista de 21 kilómetros. Espera, asimismo, poder llegar a competir un día con el alemán Michael Epp, uno de los referentes mundiales de este deporte, con varios títulos del mundo a sus espaldas. Aspira también a convertirse en monitor en los próximos meses. Anima además a todos los aficionados al deporte a practicarlo, aunque después de haberse formado previamente con un instructor. “Bien practicado, resulta muy saludable para todas las edades, se ejercita todo el cuerpo, se fortalece la espalda y se beneficia la higiene postural”.-