Manolo Jiménez, nuevo entrenador del Real Zaragoza, tomó este lunes las riendas del colista de Primera división y, tras diez minutos de toma de contacto en el vestuario con la plantilla, empezó a preparar el trascendental partido que disputarán el próximo sábado frente al Rácing en el Nuevo Sardinero de Santander.

El nuevo técnico zaragocista realizó una sesión preparatoria de un hora y tres cuartos de duración en la que empezó a conocer a sus nuevos jugadores y con la mirada puesta en Santander donde deben empezar a olvidar lo acontecido en los tres últimos meses del recién finalizado 2011, en el que acumularon hasta once partidos consecutivos, entre Liga y Copa del Rey sin conocer la victoria.

Lo primero que hizo Jiménez fue reunirse con la plantilla antes de empezar a trabajar sobre el césped de las instalaciones de la Ciudad Deportiva, en la que lo más destacado fueron los movimientos tácticos tanto de ataque como defensa, en una semana en la que únicamente dispondrá de cinco días para poder preparar lo mejor posible el encuentro frente a los cántabros.

En el primer partido del 2012, el entrenador sevillano no podrá contar por sanción con Leo Ponzio y Maurizio Lanzaro, mientras que David Mateos, Paulo Da Silva y Rubén Micael, que hicieron carrera suave, parece bastante complicado que estén a en condiciones de disputar el partido.

Aunque todavía restan cuatro días para que Jiménez debute en el banquillo zaragocista en sustitución del mexicano Javier Aguirre, ensayó con un once en el que probablemente introduzca algún cambio pero que podría considerarse la base del que se enfrentará a los racinguistas y en el que lo más destacado fue la presencia del ecuatoriano Joel Valencia en el ataque.

Los once hombres con los que trabajó el técnico de Arahal fueron: Roberto; Juárez, Pinter, Paredes, Abraham; Meira, Zuculini; Juan Carlos, Joel, Lafita y Postiga.