Los Mallos de Riglos miden a 50 escaladores

Cincuenta escaladores en 25 patrullas llevan hoy la espectacularidad de la escalada a los Mallos de Riglos. Peña Guara ha organizado el primer rally de escalada por las moles rojizas que se levantan a orillas del Gállego y en el que estarán los más fuertes de la especialidad.

La competición comenzará a las 8 de la mañana y terminará a las 20.00. Serás 12 horas para escalar las 21 vías estipuladas por la organización. Los mínimos requisitos que exige la organización es que todos los escaladores deben hacer sin problemas 6b equipado y V+ y cada miembro de la cordada debe tener una resistencia mínima para escalar 6 horas sin problemas.

Manolo Bara, presidente de Peña Guara, destaca la plasticidad de una prueba que puede ser seguida por los aficionados desde varios puntos de la zona y siempre que se ayuden de unos prismáticos. "A todo aquél que le guste la escalada o que le guste ver este deporte tiene mañana (por hoy) una gran oportunidad para ver a los más fuertes, y de paso conocer la Galliguera, una zona digna de ver por sus numerosos atractivos", indica Manolo Bara.

Dos cordadas familiares

Cada cordada está compuesta por dos escaladores. Las hay mixtas, de solo hombres y de solo mujeres. Dos destacan sobre el resto debido a que están formadas por padre e hijo. Una de ellas es aragonesa, de Ayerbe, y está compuesta por Ignacio y Nacho Cinto. La otra es la de los madrileños Ruballo.

El sistema de competición consiste en encadenar el mayor número de vías posibles. Cada una tiene una puntuación en razón de su dificultad. Quien más puntos consiga es el vencedor. Manolo Bara subraya que "la rivalidad sana es innata" en todo deporte y por lo tanto también en la montaña. "Seguro que habrá algún pique, pero siempre con educación", dice con una sonrisa el presidente de Peña Guara.

A las 7.00 está previsto el sorteo de salida. Cada cordada tendrá asignada una vía de inicio y a partir de allí la forma de encadenarlas es libre. En el caso de que dos cordadas coincidan en la misma zona, la que esté en la parte de arriba tiene preferencia sobre la que le persigue. En el caso de que la de abajo sea más fuerte, la de arriba tiene la oportunidad de decidir si la deja pasar o no. Y en esto, como en el golf, la educación manda y el lento debe dejar pasar al rápido.

Los Mallos de Riglos se convierte así en el segundo punto de España donde se celebra una prueba de este tipo. Su antecesor es el Peñón de Ifach, en Calpe, donde ya se han celebrado siete ediciones.

Este rincón de la comarca de La Hoya es desde hace medio siglo un desafío para escaladores españoles y extranjeros. En esta primera edición solo habrá cordadas nacionales. Además de aragoneses, navarros, vascos, madrileños, valencianos y catalanes componen el grueso de los participantes. "Sin duda van a estar los más fuertes. No me atrevo a decir los mejoras, porque esa palabra la desconozco en ámbitos montañeros, pero desde luego sí que estarán en Riglos los más fuertes", afirma Manolo Bara.

La escalada moderna y el equipamiento de numerosas rutas con paraboles ha hecho que la escalada en Riglos, ates muy arriesgada, sea hoy una escalada acrobática y difícil, pero mucho más seguros. Cada fin de semana, sus paredes son abordadas por numerosas cordadas que se encaraman a los mallos para disfrutar de su verticalidad.